- Botero esculturas (1998)
- Salmona (1998)
- El sabor de Colombia (1994)
- Wayuú. Cultura del desierto colombiano (1998)
- Semana Santa en Popayán (1999)
- Cartagena de siempre (1992)
- Palacio de las Garzas (1999)
- Juan Montoya (1998)
- Aves de Colombia. Grabados iluminados del Siglo XVIII (1993)
- Alta Colombia. El esplendor de la montaña (1996)
- Artefactos. Objetos artesanales de Colombia (1992)
- Carros. El automovil en Colombia (1995)
- Espacios Comerciales. Colombia (1994)
- Cerros de Bogotá (2000)
- El Terremoto de San Salvador. Narración de un superviviente (2001)
- Manolo Valdés. La intemporalidad del arte (1999)
- Casa de Hacienda. Arquitectura en el campo colombiano (1997)
- Fiestas. Celebraciones y Ritos de Colombia (1995)
- Costa Rica. Pura Vida (2001)
- Luis Restrepo. Arquitectura (2001)
- Ana Mercedes Hoyos. Palenque (2001)
- La Moneda en Colombia (2001)
- Jardines de Colombia (1996)
- Una jornada en Macondo (1995)
- Retratos (1993)
- Atavíos. Raíces de la moda colombiana (1996)
- La ruta de Humboldt. Colombia - Venezuela (1994)
- Trópico. Visiones de la naturaleza colombiana (1997)
- Herederos de los Incas (1996)
- Casa Moderna. Medio siglo de arquitectura doméstica colombiana (1996)
- Bogotá desde el aire (1994)
- La vida en Colombia (1994)
- Casa Republicana. La bella época en Colombia (1995)
- Selva húmeda de Colombia (1990)
- Richter (1997)
- Por nuestros niños. Programas para su Proteccion y Desarrollo en Colombia (1990)
- Mariposas de Colombia (1991)
- Colombia tierra de flores (1990)
- Los países andinos desde el satélite (1995)
- Deliciosas frutas tropicales (1990)
- Arrecifes del Caribe (1988)
- Casa campesina. Arquitectura vernácula de Colombia (1993)
- Páramos (1988)
- Manglares (1989)
- Señor Ladrillo (1988)
- La última muerte de Wozzeck (2000)
- Historia del Café de Guatemala (2001)
- Casa Guatemalteca (1999)
- Silvia Tcherassi (2002)
- Ana Mercedes Hoyos. Retrospectiva (2002)
- Francisco Mejía Guinand (2002)
- Aves del Llano (1992)
- El año que viene vuelvo (1989)
- Museos de Bogotá (1989)
- El arte de la cocina japonesa (1996)
- Botero Dibujos (1999)
- Colombia Campesina (1989)
- Conflicto amazónico. 1932-1934 (1994)
- Débora Arango. Museo de Arte Moderno de Medellín (1986)
- La Sabana de Bogotá (1988)
- Casas de Embajada en Washington D.C. (2004)
- XVI Bienal colombiana de Arquitectura 1998 (1998)
- Visiones del Siglo XX colombiano. A través de sus protagonistas ya muertos (2003)
- Río Bogotá (1985)
- Jacanamijoy (2003)
- Álvaro Barrera. Arquitectura y Restauración (2003)
- Campos de Golf en Colombia (2003)
- Cartagena de Indias. Visión panorámica desde el aire (2003)
- Guadua. Arquitectura y Diseño (2003)
- Enrique Grau. Homenaje (2003)
- Mauricio Gómez. Con la mano izquierda (2003)
- Ignacio Gómez Jaramillo (2003)
- Tesoros del Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario. 350 años (2003)
- Manos en el arte colombiano (2003)
- Historia de la Fotografía en Colombia. Museo de Arte Moderno de Bogotá (1983)
- Arenas Betancourt. Un realista más allá del tiempo (1986)
- Los Figueroa. Aproximación a su época y a su pintura (1986)
- Andrés de Santa María (1985)
- Ricardo Gómez Campuzano (1987)
- El encanto de Bogotá (1987)
- Manizales de ayer. Album de fotografías (1987)
- Ramírez Villamizar. Museo de Arte Moderno de Bogotá (1984)
- La transformación de Bogotá (1982)
- Las fronteras azules de Colombia (1985)
- Botero en el Museo Nacional de Colombia. Nueva donación 2004 (2004)
- Gonzalo Ariza. Pinturas (1978)
- Grau. El pequeño viaje del Barón Von Humboldt (1977)
- Bogotá Viva (2004)
- Albergues del Libertador en Colombia. Banco de la República (1980)
- El Rey triste (1980)
- Gregorio Vásquez (1985)
- Ciclovías. Bogotá para el ciudadano (1983)
- Negret escultor. Homenaje (2004)
- Mefisto. Alberto Iriarte (2004)
- Suramericana. 60 Años de compromiso con la cultura (2004)
- Rostros de Colombia (1985)
- Flora de Los Andes. Cien especies del Altiplano Cundi-Boyacense (1984)
- Casa de Nariño (1985)
- Periodismo gráfico. Círculo de Periodistas de Bogotá (1984)
- Cien años de arte colombiano. 1886 - 1986 (1985)
- Pedro Nel Gómez (1981)
- Colombia amazónica (1988)
- Palacio de San Carlos (1986)
- Veinte años del Sena en Colombia. 1957-1977 (1978)
- Bogotá. Estructura y principales servicios públicos (1978)
- Colombia Parques Naturales (2006)
- Érase una vez Colombia (2005)
- Colombia 360°. Ciudades y pueblos (2006)
- Bogotá 360°. La ciudad interior (2006)
- Guatemala inédita (2006)
- Casa de Recreo en Colombia (2005)
- Manzur. Homenaje (2005)
- Gerardo Aragón (2009)
- Santiago Cárdenas (2006)
- Omar Rayo. Homenaje (2006)
- Beatriz González (2005)
- Casa de Campo en Colombia (2007)
- Luis Restrepo. construcciones (2007)
- Juan Cárdenas (2007)
- Luis Caballero. Homenaje (2007)
- Fútbol en Colombia (2007)
- Cafés de Colombia (2008)
- Colombia es Color (2008)
- Armando Villegas. Homenaje (2008)
- Manuel Hernández (2008)
- Alicia Viteri. Memoria digital (2009)
- Clemencia Echeverri. Sin respuesta (2009)
- Museo de Arte Moderno de Cartagena de Indias (2009)
- Agua. Riqueza de Colombia (2009)
- Volando Colombia. Paisajes (2009)
- Colombia en flor (2009)
- Medellín 360º. Cordial, Pujante y Bella (2009)
- Arte Internacional. Colección del Banco de la República (2009)
- Hugo Zapata (2009)
- Apalaanchi. Pescadores Wayuu (2009)
- Bogotá vuelo al pasado (2010)
- Grabados Antiguos de la Pontificia Universidad Javeriana. Colección Eduardo Ospina S. J. (2010)
- Orquídeas. Especies de Colombia (2010)
- Apartamentos. Bogotá (2010)
- Luis Caballero. Erótico (2010)
- Luis Fernando Peláez (2010)
- Aves en Colombia (2011)
- Pedro Ruiz (2011)
- El mundo del arte en San Agustín (2011)
- Cundinamarca. Corazón de Colombia (2011)
- El hundimiento de los Partidos Políticos Tradicionales venezolanos: El caso Copei (2014)
- Artistas por la paz (1986)
- Reglamento de uniformes, insignias, condecoraciones y distintivos para el personal de la Policía Nacional (2009)
- Historia de Bogotá. Tomo I - Conquista y Colonia (2007)
- Historia de Bogotá. Tomo II - Siglo XIX (2007)
- Academia Colombiana de Jurisprudencia. 125 Años (2019)
- Duque, su presidencia (2022)
La Metodología de la Formación Profesional
Difusión de los servicios de la entidad. Grabación de un programa de televisión en 1967.
Método de los cuatro pasos: 2o. El trabajador-alumno dice y el instructor hace.
La metodología establece unos criterios específicos para la construcción de los centros...
Y para el diseño de los talleres.
Texto de: Ricardo Lucio A.
Asesor Nacional de Planeación, SENA
Metodología es la manera sistemática como el SENA ha realizado su labor de formación profesional; esta "manera" ha girado alrededor de un método específico adaptado por el SENA llamado tradicionalmente "Método Analítico, Activo y Dinámico" o, más sencillamente, "Metodología Analítica". Dado el importante papel que la Metodología Analítica ha jugado en el desarrollo histórico de la acción del SENA y en su configuración misma como entidad, en la primera parte de la exposición de este tema se hará un recuento de sus principios básicos y de su especificidad. Luego, se mencionarán otras metodologías desarrolladas por el SENA que, en última instancia, no son sino aplicaciones concretas o modificaciones de la Metodología Analítica y, por último, se señalarán algunos de los nuevos rumbos de investigación y práctica metodológica tomados durante los últimos años.
La Metodología Analítica
Fuentes.
- El pragmatismo norteamericano desarrolló un sistema de formación en la empresa durante la segunda guerra mundial. Este sistema tenía como objeto capacitar, en el menor tiempo posible, mano de obra calificada para puestos concretos de trabajo en los sectores modernos de la economía, a fin de llenar los vacíos que dejaba la mano de obra calificada enviada al frente. El trabajador era formado en la empresa misma, por su jefe inmediato o supervisor. La clave del método es doble: capacitar a los supervisores en su nuevo papel de supervisores?formadores, y definir los conocimientos y destrezas básicos que exige un puesto de trabajo, a fin de que pueda ser ocupado de una manera pronta y eficiente, sin deterioro de la producción, por nueva mano de obra. El método llamado "Training Within Industry" (TWI), fue llevado posteriormente a Europa, durante los años de reconstrucción económica posteriores a la guerra.
- Por otra parte, en el viejo continente se habían desarrollado centros especializados en formación profesional. Estos centros, distintos a los sitios de trabajo, procuraban sin embargo reconstruir por medio de talleres didácticos las condiciones reales de la producción, de una manera pedagógica y adaptada al proceso de aprendizaje. Esto supone el surgimiento de una metodología específica de formación profesional, que no necesariamente se identifica con el proceso de producción (puesto que no se realiza en la fábrica), pero que es bien distinta de la formación académica corriente: los centros son más parecidos a la fábrica que a las aulas. Los franceses, especialmente, habían desarrollado estudios y metodologías concretas de formación profesional.
- Recopilando un poco las experiencias desarrolladas en los países más industrializados, Brasil había generado su sistema propio de capacitación profesional * El SENAI, Servicio Nacional de Aprendizaje Industrial, dirigido y coordinado por el sector privado industrial brasileño, venía funcionando desde 1942. La influencia del SENAI es tan clara, que puede afirmarse que los sistemas de formación profesional desarrollados por europeos y norteamericanos vinieron al SENA, concretizados en la experiencia brasileña. No sólo se contó con el aporte de expertos del SENAI, sino que muchos de los primeros funcionarios, incluido el director general, vieron en sus visitas al Brasil la forma concreta ?diseño de una entidad, metodología, etc., como se podía impartir formación profesional. Este proceso de transferencia Brasil?Colombia no comienza con la creación del SENA, ni es en primera instancia relación directa SENAI?SENA. Como se mencionó en la primera parte, un buen grupo de funcionarios de las Escuelas Técnicas del Ministerio de Educación se había formado en el SENAI; así mismo, expertos del SENAI, contratados por la OIT, venían asesorando al Instituto de Capacitación Obrera, del Ministerio de Trabajo; el naciente SENA recoge estas experiencias, constituye sus primeros equipos de trabajo con los profesionales colombianos que las han vivido, asume la asesoría prestada al Instituto de Capacitación Obrera y, a través de estos vehículos, recibe los principios metodológicos básicos con los cuales se arma para iniciar su propia tarea de reelaboración, creación, adecuación y sistematización de la formación profesional.
- La OIT, como agencia internacional, realiza un papel más que todo de intermediario: no existe metodología propia aportada por la OIT. La misión que estaba en Colombia, cuando fue creado el SENA, contrató expertos brasileños que aportaron sus conocimientos. Misiones posteriores del mismo organismo trajeron expertos europeos, especialmente franceses, que irían a aportar las experiencias del viejo continente.
La elaboración de los programas de formación profesional
El método implica, como punto de partida, investigaciones socio?económicas sobre las posibilidades de expansión y necesidades de recursos humanos para los sectores de la economía nacional, que indiquen para qué ocupaciones prioritarias se debe impartir formación profesional. En este punto, resultarán muy útiles los estudios que con la asesoría de la OIT se venían realizando en el país sobre organización de las estadísticas de trabajo y sobre necesidades de mano de obra; el SENA, así mismo, realiza su propia encuesta en 1958. El diagnóstico señala en ese entonces, como necesidad prioritaria, la capacitación de obreros calificados en el mantenimiento del equipo industrial, en el área metalmecánica y de máquinas?herramientas, fundamentalmente.
- Conocida la ocupación específica en la cual se quiere capacitar, el primer paso es un estudio sistemático de dicha ocupación, el análisis ocupacional, que se realiza en una muestra de empresas de diferentes tamaños, regiones y estructuras, mediante entrevistas con supervisores y trabajadores y la observación directa del desempeño de la ocupación.
- Con base en el análisis sistemático de la ocupación se elabora una monografía profesional, que es una descripción ideal de las características fundamentales del puesto de trabajo y de la manera de desempeñarlo. La monografía profesional permite, así mismo, elaborar un cuadro analítico de las operaciones y conocimientos que se necesitan para desempeñar eficientemente ese puesto de trabajo; dichos conocimientos y operaciones se ordenan de una manera pedagógica y serán el objetivo inmediato del proceso de aprendizaje, ya que en tomo a ellos debe girar la elaboración del currículo.
- Los conocimientos y operaciones necesarios para desempeñar correcta y eficientemente una ocupación claramente definida se agrupan en diferentes materias, teóricas y prácticas, cuyos contenidos, intensidad y duración se puntualizan en un plan de estudios. Para cada materia, así especificada, se elabora entonces un programa analítico que indica cuál debe ser el orden lógico y metodológico de sus unidades de instrucción y qué conocimientos y operaciones deben incluirse en cada una de ellas.
- Con los programas analíticos listos, los expertos en formación profesional elaboran entonces los contenidos propiamente dichos de los “cursos” en las unidades de enseñanza. De estas unidades, las más peculiares son aquellas que corresponden a las materias técnicas o de taller, que con el nervio de la formación profesional. En cada unidad se deben enseñar sus operaciones concretas, junto con unos conocimientos necesarios para realizar dichas operaciones; para lo cual hay que realizar un ejercicio útil (V.g.: construir una pieza, elaborar un artefacto ... ), cuya ejecución reúna las operaciones y conocimientos que deben ser asimilados, según el programa analítico, en dicha unidad; la clave del diseño metodológico está en la ubicación y presentación de estos ejercicios, de manera que para su ejecución el alumno realice las operaciones y adquiera los conocimientos requeridos en un orden lógico y metodológico: partir de lo más simple, para llegar a lo más complejo; de lo más fácil a lo más difícil. Cada unidad se encuentra desarrollada en unas fichas de instrucción muy completas; en ellas se describe el ejercicio que se debe realizar, se presentan las herramientas y materiales necesarios, se da instrucción sobre su manejo, se indican los conocimientos relacionados que se deben aplicar; las unidades tienen también fichas complementarias sobre normas de seguridad y comportamiento que hay que observar durante la ejecución del ejercicio.
- La colección de unidades elaboradas para las diferentes materias “básicas, de taller, teóricas y relacionadas”, que requiere el aprendizaje de una ocupación determinada, forma una serie metódica. Se puede decir entonces que la serie metódica es la presentación pedagógica del conjunto de operaciones que se deben efectuar y de los conocimientos que se deben adquirir, para desempeñar correctamente un oficio concreto.
Aplicación de la Metodología
La metodología analítica no implica simplemente las técnicas de elaboración de unas unidades para saber qué se debe enseñar; se necesita además saber cómo se imparte la formación profesional, con los contenidos definidos. En primer lugar, la correcta aplicación de las unidades supone la adquisición de una serie de materiales: herramientas, maquinaria y equipo. Una vez resuelto el problema “materiales”, viene un segundo punto: el sitio; es necesario diseñar los talleres y las aulas; cada taller está destinado para una especialidad, lo cual implica definir componentes físicos tales como luz, ambiente, color, tamaño, etc., de tal manera que reproduzca lo más exactamente posible las condiciones reales de trabajo; el diseño del taller lleva consigo la ubicación de los puestos para los trabajadores alumnos (doce según la metodología original) y para el instructor, así como del material necesario para el desarrollo de las unidades correspondientes; es necesario dotar también, especialmente a las aulas destinadas a materias teóricas complementarias, de ayudas didácticas adecuadas. Los materiales, instrumentos, instalaciones, los criterios de selección de ayudas y las características de los instructores constituyen el paquete didáctico. Por último, el diseño de los talleres determina la configuración de los centros. Un centro es un complejo de formación profesional destinado generalmente a un sector económico específico y, como tal, tiene una serie de elementos: área administrativa, área social, áreas de circulación, depósitos, campos deportivos, etc.; pero sus ingredientes más importantes son las áreas específicas de formación profesional, donde se encuentran aulas y talleres, planificados según las necesidades generales de la formación integral y según las necesidades particulares de cada especialidad.
Resueltos los problemas del "qué" y del "cómo" se puede entonces hacer formación profesional. Los sujetos de esta acción son fundamentalmente el instructor y el trabajador alumno. El instructor está equipado con un paquete didáctico elaborado específicamente para su especialidad. Cada unidad se desarrolla en una o varias sesiones de formación profesional, dependiendo de su extensión y complejidad, así como de la intensidad señalada en el currículo. En estas sesiones se realiza progresivamente un trabajo de síntesis, inverso a la descomposición analítica de la ocupación: partiendo de las nociones y tareas indicadas en cada unidad?ejercicio de la serie metódica, se van integrando paulatinamente el conjunto de operaciones y conocimientos del cuadro analítico, para reconstruir finalmente el oficio, pero no ya en abstracto, sino encarnado en un trabajador alumno, que se convierte en trabajador calificado.
El proceso así descrito parece muy mecánico. Su realización, sin embargo, supone un esfuerzo creativo permanente por parte del trabajador alumno; la integración de habilidades y conocimientos parte del principio de "enseñar haciendo". Este principio supone una vinculación muy estrecha entre aula y taller, que se refleja en la distribución de espacios asignada a los primeros centros. En la práctica concreta de formación profesional,- el instructor es un técnico que ha practicado, en una empresa real, el oficio dentro del cual dicta su especialidad; además se le pide que domine perfectamente el método analítico (es parte de su formación como instructor), y las unidades concretas de la enseñanza que tiene a su cargo. La sesión de trabajo de instructor y alumnos?trabajadores parte casi siempre de la presentación y realización del ejercicio concreto, alrededor del cual giran los demás conocimientos y operaciones; en la ejecución, la técnica seguida se ha llamado tradicionalmente el método "de los cuatro pasos", tomado directamente del TWI:
- El instructor dice y hace.
- El trabajador-alumno dice y el instructor hace.
- El trabajador-alumno dice y hace,
- El trabajador-alumno hace y el instructor supervisa.
En síntesis, la metodología se define como analítica, porque parte del análisis y descomposición de las ocupaciones y puestos de trabajo, para llegar a establecer los contenidos de los programas. Activa, porque su aplicación supone el trabajo creativo y práctico constante del alumno, con el apoyo del instructor, en el desarrollo de destrezas y adquisición de conocimientos. Dinámica, porque su supervivencia depende de un continuo esfuerzo de adaptación, mediante el análisis ocupacional sistemático, a las necesidades siempre cambiantes de los aparatos productivos.
Extensión de la metodología
El método de enseñanza definido originalmente como “activo, directo y global”, es evaluado hacia 1963?64 con los trabajos adelantados en el centro nacional de formación de instructores y, después de algunos ajustes, recibe oficialmente el nombre con que se le conoce hoy: “metodología analítica, activa y dinámica”.
Esta metodología fue diseñada y practicada con todas sus implicaciones en las primeras etapas de la vida del SENA; con ella no solamente se diseñaron las series metódicas de las primeras especialidades del aprendizaje industrial (máquinas?herramientas, soldadura, mecánica automotriz, electricidad), sino que determinó decididamente la configuración de los talleres, la importación de maquinaria y equipo y aún, el diseño arquitectónico del primer plan de construcciones, que tuvo como objetivo la creación de 10 grandes centros industriales metalmecánicos (además de uno comercial), para todo el país. Es decir, la metodología fue concebida originalmente para llenar los requisitos del aprendizaje de tiempo completo en el sector industrial moderno.
Por extensión, la metodología es aplicada también a la formación de adultos; el adulto, vinculado ya a un trabajo concreto, va al SENA a complementar su formación; generalmente asiste a cursos nocturnos; se le hace un examen para dictaminar qué cursos debe tomar (en forma de créditos) para equipararse en conocimientos y destrezas al aprendiz egresado con el Certificado de Aptitud Profesional (CAP). Se realiza entonces, para su formación, una selección de las materias o unidades que debe tomar, de la serie metódica confeccionada para el aprendizaje del oficio correspondiente.
Se aplicó también, por extensión, la metodología analítica a la formación de trabajadores?alumnos en los sectores Agropecuario, Comercio y Servicios. Quizá la modificación fundamental sufrida por el método tuvo lugar a comienzos de la presente década, cuando se elevó el número de alumnos por grupo de 12 (número para el cual habían sido originalmente diseñados los talleres), a 25 6 30.
Otros métodos de Formación Profesional
La aplicación de la metodología analítica a otros modos de formación, distintos del aprendizaje, pero sobre todo a otros sectores económicos, diferentes del industrial moderno, no se realizó sin algunas dificultades; el problema no radica tanto en los principios del análisis ocupacional, que siguen siendo válidos si la formación profesional quiere responder a las necesidades reales de la empresa moderna, a la racionalización y operativización de sus puestos de trabajo; las dificultades residen más bien en la fase de aplicación de la metodología analítica: un sistema de formación que parte de la base de la existencia del taller y de unos ejercicios útiles fácilmente manipulables desde el punto de vista pedagógico, no siempre puede trasladarse con exactitud a actividades que manejan contenidos algo intangibles (como las de los sectores de comercio y servicios), o a medios y condiciones de producción no tan fácilmente controlables (como es el caso de las actividades agropecuarias). Esto hizo necesario realizar no pocas modificaciones en las aplicaciones del método, a fin de hacerlo viable en actividades distintas de aquellas para las cuales fue desarrollado.
En el sector comercial se adopta, hacia 1964, una metodología específica para el sector: La Empresa Comercial Didáctica, diseñada en Francia por la Cámara de Comercio de París y utilizada con éxito por el Servicio Nacional de Aprendizaje Comercial, SENAC, de Brasil. La empresa comercial didáctica está organizada de tal manera que desarrolla las actividades de una empresa comercial real, reproduce sus funciones y puestos de trabajo, tanto administrativos como de distribución y mercado, funciona de manera permanente, con papelería, operaciones, tareas y flujos de trabajo reales. La realización óptima de este tipo de metodología supone no solamente el análisis ocupacional, sino también un estudio operacional de las empresas del sector y viene a ser como una especie de taller para el aprendizaje comercial.
Los grandes centros de aprendizaje del sector agropecuario aparecen después de que se ha desarrollado la acción del SENA en los otros dos sectores. Para este tiempo ya se ha definido y reglamentado minuciosamente la metodología (acuerdo 4 de 1963), y su aplicación al sector se hace de una manera bastante rígida. Los aprendizajes agroindustriales (agricultura mecanizada y maquinaria agrícola) se realizan con el mismo método diseñado para la industria. Sin embargo, el problema metodológico para el sector agropecuario no se soluciona en los grandes centros: gran parte de las necesidades de formación profesional se encuentra en los sectores tradicionales de la agricultura, en regiones muy apartadas de los centros, donde los trabajadores no pueden abandonar la tierra para dedicarse a una formación de tiempo completo; además, los centros no reproducen sus condiciones reales de trabajo. Por eso, aún antes de la aparición de los centros agropecuarios, equipos ambulantes del SENA tienen que capacitar en los mismos sitios de trabajo, combinando formación profesional con asesoría al aparato productivo mismo, en una metodología intuitiva muchas veces, que es preludio de la metodología empleada años más tarde en los programas móviles.
Los sectores no modernos de la economía, especialmente los tradicionales, presentan dos características fundamentales. En primer lugar, la escasa división del trabajo no permite identificar puestos específicos de trabajo mediante una análisis ocupacional de tipo ortodoxo. En segunda instancia, los mismos trabajadores son muchas veces los dueños de los medios de producción, lo cual hace que, a su nivel, el trabajo se confunda con la gestión empresarial y el desarrollo comunitario con el desarrollo de los aparatos productivos. Estas características explican en buena parte por que fracasó la atención a estos sectores, cuando se quiso transportar mecánicamente la metodología diseñada para los grandes centros y la economía formal. Como se indica en otra parte la nueva metodología aplicada en los programas móviles trata de suplir estas deficiencias: 1) orientando el análisis ocupacional a identificar no puestos concretos de trabajo, sino productos terminales que puedan ser o sean elaborados en la zona, a fin de capacitar a los trabajadores para producir bienes o servicios concretos que en alguna manera puedan elevar los ingresos y, 2) mezclando técnicas de capacitación profesional con técnicas de asesoría de empresas, en programas integrales de asistencia y desarrollo de tecnologías apropiadas, que funcionan en coordinación con los programas móviles, como son el CEC (Capacitación Empresarial Campesina), para el sector rural y el IDSE (Instrucción de Desarrollo Social Empresarial) para el urbano.
Renovación Metodológica del SENA
Existen una serie de fenómenos y circunstancias nuevas, tales como los avances en las técnicas de producción, con el nacimiento de nuevos puestos de trabajo y la desaparición de otros; los avances de la tecnología y pedagogía educativas; el desarrollo de los medios masivos de comunicación; el consiguiente incremento de complejidad en la relación hombre?naturaleza y hombre?sociedad; la necesidad de multiplicar la acción del SENA, a fin de darle mayor eficacia y rentabilidad, y de llegar a sectores poblacionales que no tienen acceso directo a los servicios de la entidad, ante las necesidades siempre crecientes de formación profesional; la preocupación, al interior del SENA, por el anquilosamiento de la metodología con el consiguiente deterioro en la calidad de la formación profesional. Todos estos ingredientes hacen que el SENA comience a preocuparse, ya desde la década del sesenta, por la modernización y actualización de su metodología.
A partir de 1974 la labor de renovación metodológica se canaliza en dos líneas fundamentales de trabajo: proyectar los métodos clásicos de formación profesional hacia fuera de los centros, por medio de métodos desescolarizados; y, hacia el interior de los centros, desarrollar una metodología más específica de formación en la producción.
En la introducción de métodos desescolarizados se busca complementar la formación en el centro con el trabajo individual, de manera que el alumno se autoforme mediante el seguimiento de unidades, bibliografías y ayudas audiovisuales expresamente elaboradas para el caso, con la colaboración de un instructor asesor. De esta manera se puede multiplicar la acción del instructor, no requiriéndose su presencia de tiempo completo al frente de cada grupo y el aprendizaje se ajusta al ritmo de cada alumno en particular. A nivel nacional, se están comenzando a hacer experiencias con los siguientes métodos en concreto:
- La formación individual socializada (FIS) que combina técnicas de trabajo individual con trabajo en grupo, constituyéndose así en un estadio intermedio entre las técnicas grupales y las autoformativas.
- El método de autoformación con entrevista (MAE) quizá el más experimentado hasta el presente. Después de una introducción, cada alumno elabora y discute su plan de estudios y comienza a trabajar las unidades autoformativas una por una. Al terminar una serie tiene una entrevista evaluativa con el instructor; hecha la evaluación se le entregan las unidades siguientes. Al final hay una evaluación total. El instructor además de realizar con cada alumno las entrevistas, programa un tiempo específico de consultas concretas.
- La instrucción programada (IP) es el método más desescolarizado, ya que los paquetes de unidades contienen prácticamente todo lo que tiene que realizar el alumno, inclusive las auto?evaluaciones. Las características de este método permiten aplicarlo a programas de formación masiva a distancia; por ejemplo, en cursos por correspondencia.
- En la regional de Bogotá se ha comenzado a experimentar un método que combina las técnicas de MAE con el análisis de casos, llamado TICATAC (Técnica Instruccional compuesta de autoformación con texto y análisis de casos).
Un proyecto que tendrá que afectar de alguna manera la metodología de formación profesional es la política de la entidad de que los centros de formación profesional tengan una producción comercializable de bienes y/o servicios. Para ello se comienza a trabajar con un sistema de formación en la producción en algunos centros escogidos como pilotos para el proyecto nacional. Del resultado de esta experiencia saldrán modificaciones en las etapas lectivas y productivas del aprendizaje y en los ejercicios útiles de las unidades de enseñanza, lo cual posiblemente implicará una formación mucho más real, adaptada no sólo a puestos de trabajo sino a procesos concretos de producción.
El crecimiento de las necesidades de formación profesional hizo que la labor metodológica del SENA se redujera a diseñar análisis ocupacionales y monografías profesionales para los nuevos puestos de trabajo que se iban generando en los distintos sectores de la economía; sin embargo, la cantidad siempre creciente de estos documentos hacía cada vez más difícil su actualización permanente; monografías profesionales del sector agropecuario y metalmecánico, para no citar más que dos ejemplos, elaboradas en 1955 y 1959 respectivamente, servían todavía de fundamento, en 1975, para la formación profesional en dichos sectores, sin modificaciones en el contenido de sus correspondientes series metódicas; se perdió así, poco a poco, el aspecto "dinámico", definido como constitutivo integral de la metodología. A partir de 1976 se comienza un trabajo que tiene como intención recuperar la dinámica del análisis ocupacional, al menos en el sector industrial; el trabajo, denominado "análisis globales de puestos de trabajo", emplea herramientas más comprensivas y eficientes que las empleadas hasta ahora; se parte de diseños estadísticos, con muestras representativas del conjunto del sector industrial colombiano; así mismo, la sistematización de datos en el computador permite una mayor eficacia y posibilidades de continua actualización del programa. El objetivo del estudio es encontrar familias de oficios con tareas comunes, para desarrollar en torno a ellas módulos instruccionales de diversos tipos, unos más especializados, otros más genéricos y comunes, dentro de cada familia.
La renovación metodológica del SENA cuenta con el apoyo de varias dependencias de la Dirección General, dentro de la nueva estructura administrativa: desde el punto de vista investigativo, la función primordial de la división de Metodología es el estudio y experimentación sobre métodos y medios de formación profesional; la división de Formación tiene, entre otras funciones, la de coordinar la capacitación en métodos y técnicas del personal especializado del SENA; a un nivel más operativo, la división de Producción coordina los proyectos de formación en la producción y la división de Programación Didáctica coordina la elaboración concreta de análisis ocupacionales, series metódicas y unidades de enseñanza. En las regionales, el área operativa incluye, además de las unidades operativas, una unidad llamada de “servicios a la formación profesional”, que sirve de apoyo logístico a las unidades operativas, en lo referente a servicios al alumnado, capellanías, bibliotecas, materiales didácticos, etc.
Con este apoyo institucional, a nivel nacional y local, se viene trabajando en la elaboración de nuevas series metódicas, para oficios en los cuales la formación profesional se realiza por métodos nuevos. Muchas de las unidades ya se están empleando a nivel nacional. Igualmente, a fin de hacer experiencias concretas y de producir el material audiovisual que este impulso metodológico requiere, se han creado dos centrales didácticas, una en Bogotá y otra en Cali. Estas centrales funcionarán como una dependencia específica de las unidades de servicios a la formación profesional; la de Cali, contará con edificio e instalaciones propias; la de Bogotá funcionará en el sitio de la antigua unidad de medios; dichas centrales deben experimentar y producir para satisfacer la demanda nacional de medios audiovisuales para la formación profesional; se piensa dar énfasis a aquellos medios poco explotados hasta el momento, como son cine y televisión (circuito cerrado).
Conclusión
La transferencia de una tecnología concreta para la formación profesional, aplicada con éxito en otros países como Brasil y adaptada a la realidad concreta de nuestro país, gracias al sistema del análisis ocupacional, representa en su tiempo una verdadera revolución dentro del contexto de la educación colombiana. Sin embargo, la escasa compenetración existente entre los sistemas de formación profesional, en especial el SENA, y los sistemas educativos formales impidieron que los logros tuvieran una mayor relevancia. Como se ha visto, la actividad “metodológica2 de los primeros años de vida del SENA fue muy creadora, llegando inclusive a determinar e integrarse con otros aspectos claves del desarrollo institucional: construcción de centros, diseño de talleres, dotación de equipos y capacitación del personal humano. A partir del Acuerdo 4 de 1963 esta actividad se plasma en una serie de normas y disposiciones que tuvieron como primer objetivo sistematizar lo logrado a fin de unificar y clarificar criterios. Posteriormente, el crecimiento de la entidad hizo que se perdiera algo de primer ímpetu creador del cual en muchas ocasiones, sólo subsistieron las normas escritas que, a manera de fórmulas, permitían recorrer maquinalmente, los pasos del diseño y de la aplicación de la metodología analítica, para aplicarla a una realidad siempre cambiante. Hoy se impone el SENA la tarea de renovación metodológica, que es pieza integral de la modernización de la entidad emprendida a partir de 1974. El principio del análisis ocupacional permanece como punto de partida para la elaboración de nuevos conceptos de formación profesional: sólo él puede hacer que la capacitación responda a las necesidades concretas del crecimiento económico del país. Pero su aplicación necesita, como en sus orígenes, estar ligada a un sin número de factores; por eso la Entidad debe integrar el trabajo de análisis de las ocupaciones típicas de los sectores modernos e informales con la renovación de equipos, la investigación de los sectores más dinámicos de la economía, etc.
#AmorPorColombia
La Metodología de la Formación Profesional
Difusión de los servicios de la entidad. Grabación de un programa de televisión en 1967.
Método de los cuatro pasos: 2o. El trabajador-alumno dice y el instructor hace.
La metodología establece unos criterios específicos para la construcción de los centros...
Y para el diseño de los talleres.
Texto de: Ricardo Lucio A.
Asesor Nacional de Planeación, SENA
Metodología es la manera sistemática como el SENA ha realizado su labor de formación profesional; esta "manera" ha girado alrededor de un método específico adaptado por el SENA llamado tradicionalmente "Método Analítico, Activo y Dinámico" o, más sencillamente, "Metodología Analítica". Dado el importante papel que la Metodología Analítica ha jugado en el desarrollo histórico de la acción del SENA y en su configuración misma como entidad, en la primera parte de la exposición de este tema se hará un recuento de sus principios básicos y de su especificidad. Luego, se mencionarán otras metodologías desarrolladas por el SENA que, en última instancia, no son sino aplicaciones concretas o modificaciones de la Metodología Analítica y, por último, se señalarán algunos de los nuevos rumbos de investigación y práctica metodológica tomados durante los últimos años.
La Metodología Analítica
Fuentes.
- El pragmatismo norteamericano desarrolló un sistema de formación en la empresa durante la segunda guerra mundial. Este sistema tenía como objeto capacitar, en el menor tiempo posible, mano de obra calificada para puestos concretos de trabajo en los sectores modernos de la economía, a fin de llenar los vacíos que dejaba la mano de obra calificada enviada al frente. El trabajador era formado en la empresa misma, por su jefe inmediato o supervisor. La clave del método es doble: capacitar a los supervisores en su nuevo papel de supervisores?formadores, y definir los conocimientos y destrezas básicos que exige un puesto de trabajo, a fin de que pueda ser ocupado de una manera pronta y eficiente, sin deterioro de la producción, por nueva mano de obra. El método llamado "Training Within Industry" (TWI), fue llevado posteriormente a Europa, durante los años de reconstrucción económica posteriores a la guerra.
- Por otra parte, en el viejo continente se habían desarrollado centros especializados en formación profesional. Estos centros, distintos a los sitios de trabajo, procuraban sin embargo reconstruir por medio de talleres didácticos las condiciones reales de la producción, de una manera pedagógica y adaptada al proceso de aprendizaje. Esto supone el surgimiento de una metodología específica de formación profesional, que no necesariamente se identifica con el proceso de producción (puesto que no se realiza en la fábrica), pero que es bien distinta de la formación académica corriente: los centros son más parecidos a la fábrica que a las aulas. Los franceses, especialmente, habían desarrollado estudios y metodologías concretas de formación profesional.
- Recopilando un poco las experiencias desarrolladas en los países más industrializados, Brasil había generado su sistema propio de capacitación profesional * El SENAI, Servicio Nacional de Aprendizaje Industrial, dirigido y coordinado por el sector privado industrial brasileño, venía funcionando desde 1942. La influencia del SENAI es tan clara, que puede afirmarse que los sistemas de formación profesional desarrollados por europeos y norteamericanos vinieron al SENA, concretizados en la experiencia brasileña. No sólo se contó con el aporte de expertos del SENAI, sino que muchos de los primeros funcionarios, incluido el director general, vieron en sus visitas al Brasil la forma concreta ?diseño de una entidad, metodología, etc., como se podía impartir formación profesional. Este proceso de transferencia Brasil?Colombia no comienza con la creación del SENA, ni es en primera instancia relación directa SENAI?SENA. Como se mencionó en la primera parte, un buen grupo de funcionarios de las Escuelas Técnicas del Ministerio de Educación se había formado en el SENAI; así mismo, expertos del SENAI, contratados por la OIT, venían asesorando al Instituto de Capacitación Obrera, del Ministerio de Trabajo; el naciente SENA recoge estas experiencias, constituye sus primeros equipos de trabajo con los profesionales colombianos que las han vivido, asume la asesoría prestada al Instituto de Capacitación Obrera y, a través de estos vehículos, recibe los principios metodológicos básicos con los cuales se arma para iniciar su propia tarea de reelaboración, creación, adecuación y sistematización de la formación profesional.
- La OIT, como agencia internacional, realiza un papel más que todo de intermediario: no existe metodología propia aportada por la OIT. La misión que estaba en Colombia, cuando fue creado el SENA, contrató expertos brasileños que aportaron sus conocimientos. Misiones posteriores del mismo organismo trajeron expertos europeos, especialmente franceses, que irían a aportar las experiencias del viejo continente.
La elaboración de los programas de formación profesional
El método implica, como punto de partida, investigaciones socio?económicas sobre las posibilidades de expansión y necesidades de recursos humanos para los sectores de la economía nacional, que indiquen para qué ocupaciones prioritarias se debe impartir formación profesional. En este punto, resultarán muy útiles los estudios que con la asesoría de la OIT se venían realizando en el país sobre organización de las estadísticas de trabajo y sobre necesidades de mano de obra; el SENA, así mismo, realiza su propia encuesta en 1958. El diagnóstico señala en ese entonces, como necesidad prioritaria, la capacitación de obreros calificados en el mantenimiento del equipo industrial, en el área metalmecánica y de máquinas?herramientas, fundamentalmente.
- Conocida la ocupación específica en la cual se quiere capacitar, el primer paso es un estudio sistemático de dicha ocupación, el análisis ocupacional, que se realiza en una muestra de empresas de diferentes tamaños, regiones y estructuras, mediante entrevistas con supervisores y trabajadores y la observación directa del desempeño de la ocupación.
- Con base en el análisis sistemático de la ocupación se elabora una monografía profesional, que es una descripción ideal de las características fundamentales del puesto de trabajo y de la manera de desempeñarlo. La monografía profesional permite, así mismo, elaborar un cuadro analítico de las operaciones y conocimientos que se necesitan para desempeñar eficientemente ese puesto de trabajo; dichos conocimientos y operaciones se ordenan de una manera pedagógica y serán el objetivo inmediato del proceso de aprendizaje, ya que en tomo a ellos debe girar la elaboración del currículo.
- Los conocimientos y operaciones necesarios para desempeñar correcta y eficientemente una ocupación claramente definida se agrupan en diferentes materias, teóricas y prácticas, cuyos contenidos, intensidad y duración se puntualizan en un plan de estudios. Para cada materia, así especificada, se elabora entonces un programa analítico que indica cuál debe ser el orden lógico y metodológico de sus unidades de instrucción y qué conocimientos y operaciones deben incluirse en cada una de ellas.
- Con los programas analíticos listos, los expertos en formación profesional elaboran entonces los contenidos propiamente dichos de los “cursos” en las unidades de enseñanza. De estas unidades, las más peculiares son aquellas que corresponden a las materias técnicas o de taller, que con el nervio de la formación profesional. En cada unidad se deben enseñar sus operaciones concretas, junto con unos conocimientos necesarios para realizar dichas operaciones; para lo cual hay que realizar un ejercicio útil (V.g.: construir una pieza, elaborar un artefacto ... ), cuya ejecución reúna las operaciones y conocimientos que deben ser asimilados, según el programa analítico, en dicha unidad; la clave del diseño metodológico está en la ubicación y presentación de estos ejercicios, de manera que para su ejecución el alumno realice las operaciones y adquiera los conocimientos requeridos en un orden lógico y metodológico: partir de lo más simple, para llegar a lo más complejo; de lo más fácil a lo más difícil. Cada unidad se encuentra desarrollada en unas fichas de instrucción muy completas; en ellas se describe el ejercicio que se debe realizar, se presentan las herramientas y materiales necesarios, se da instrucción sobre su manejo, se indican los conocimientos relacionados que se deben aplicar; las unidades tienen también fichas complementarias sobre normas de seguridad y comportamiento que hay que observar durante la ejecución del ejercicio.
- La colección de unidades elaboradas para las diferentes materias “básicas, de taller, teóricas y relacionadas”, que requiere el aprendizaje de una ocupación determinada, forma una serie metódica. Se puede decir entonces que la serie metódica es la presentación pedagógica del conjunto de operaciones que se deben efectuar y de los conocimientos que se deben adquirir, para desempeñar correctamente un oficio concreto.
Aplicación de la Metodología
La metodología analítica no implica simplemente las técnicas de elaboración de unas unidades para saber qué se debe enseñar; se necesita además saber cómo se imparte la formación profesional, con los contenidos definidos. En primer lugar, la correcta aplicación de las unidades supone la adquisición de una serie de materiales: herramientas, maquinaria y equipo. Una vez resuelto el problema “materiales”, viene un segundo punto: el sitio; es necesario diseñar los talleres y las aulas; cada taller está destinado para una especialidad, lo cual implica definir componentes físicos tales como luz, ambiente, color, tamaño, etc., de tal manera que reproduzca lo más exactamente posible las condiciones reales de trabajo; el diseño del taller lleva consigo la ubicación de los puestos para los trabajadores alumnos (doce según la metodología original) y para el instructor, así como del material necesario para el desarrollo de las unidades correspondientes; es necesario dotar también, especialmente a las aulas destinadas a materias teóricas complementarias, de ayudas didácticas adecuadas. Los materiales, instrumentos, instalaciones, los criterios de selección de ayudas y las características de los instructores constituyen el paquete didáctico. Por último, el diseño de los talleres determina la configuración de los centros. Un centro es un complejo de formación profesional destinado generalmente a un sector económico específico y, como tal, tiene una serie de elementos: área administrativa, área social, áreas de circulación, depósitos, campos deportivos, etc.; pero sus ingredientes más importantes son las áreas específicas de formación profesional, donde se encuentran aulas y talleres, planificados según las necesidades generales de la formación integral y según las necesidades particulares de cada especialidad.
Resueltos los problemas del "qué" y del "cómo" se puede entonces hacer formación profesional. Los sujetos de esta acción son fundamentalmente el instructor y el trabajador alumno. El instructor está equipado con un paquete didáctico elaborado específicamente para su especialidad. Cada unidad se desarrolla en una o varias sesiones de formación profesional, dependiendo de su extensión y complejidad, así como de la intensidad señalada en el currículo. En estas sesiones se realiza progresivamente un trabajo de síntesis, inverso a la descomposición analítica de la ocupación: partiendo de las nociones y tareas indicadas en cada unidad?ejercicio de la serie metódica, se van integrando paulatinamente el conjunto de operaciones y conocimientos del cuadro analítico, para reconstruir finalmente el oficio, pero no ya en abstracto, sino encarnado en un trabajador alumno, que se convierte en trabajador calificado.
El proceso así descrito parece muy mecánico. Su realización, sin embargo, supone un esfuerzo creativo permanente por parte del trabajador alumno; la integración de habilidades y conocimientos parte del principio de "enseñar haciendo". Este principio supone una vinculación muy estrecha entre aula y taller, que se refleja en la distribución de espacios asignada a los primeros centros. En la práctica concreta de formación profesional,- el instructor es un técnico que ha practicado, en una empresa real, el oficio dentro del cual dicta su especialidad; además se le pide que domine perfectamente el método analítico (es parte de su formación como instructor), y las unidades concretas de la enseñanza que tiene a su cargo. La sesión de trabajo de instructor y alumnos?trabajadores parte casi siempre de la presentación y realización del ejercicio concreto, alrededor del cual giran los demás conocimientos y operaciones; en la ejecución, la técnica seguida se ha llamado tradicionalmente el método "de los cuatro pasos", tomado directamente del TWI:
- El instructor dice y hace.
- El trabajador-alumno dice y el instructor hace.
- El trabajador-alumno dice y hace,
- El trabajador-alumno hace y el instructor supervisa.
En síntesis, la metodología se define como analítica, porque parte del análisis y descomposición de las ocupaciones y puestos de trabajo, para llegar a establecer los contenidos de los programas. Activa, porque su aplicación supone el trabajo creativo y práctico constante del alumno, con el apoyo del instructor, en el desarrollo de destrezas y adquisición de conocimientos. Dinámica, porque su supervivencia depende de un continuo esfuerzo de adaptación, mediante el análisis ocupacional sistemático, a las necesidades siempre cambiantes de los aparatos productivos.
Extensión de la metodología
El método de enseñanza definido originalmente como “activo, directo y global”, es evaluado hacia 1963?64 con los trabajos adelantados en el centro nacional de formación de instructores y, después de algunos ajustes, recibe oficialmente el nombre con que se le conoce hoy: “metodología analítica, activa y dinámica”.
Esta metodología fue diseñada y practicada con todas sus implicaciones en las primeras etapas de la vida del SENA; con ella no solamente se diseñaron las series metódicas de las primeras especialidades del aprendizaje industrial (máquinas?herramientas, soldadura, mecánica automotriz, electricidad), sino que determinó decididamente la configuración de los talleres, la importación de maquinaria y equipo y aún, el diseño arquitectónico del primer plan de construcciones, que tuvo como objetivo la creación de 10 grandes centros industriales metalmecánicos (además de uno comercial), para todo el país. Es decir, la metodología fue concebida originalmente para llenar los requisitos del aprendizaje de tiempo completo en el sector industrial moderno.
Por extensión, la metodología es aplicada también a la formación de adultos; el adulto, vinculado ya a un trabajo concreto, va al SENA a complementar su formación; generalmente asiste a cursos nocturnos; se le hace un examen para dictaminar qué cursos debe tomar (en forma de créditos) para equipararse en conocimientos y destrezas al aprendiz egresado con el Certificado de Aptitud Profesional (CAP). Se realiza entonces, para su formación, una selección de las materias o unidades que debe tomar, de la serie metódica confeccionada para el aprendizaje del oficio correspondiente.
Se aplicó también, por extensión, la metodología analítica a la formación de trabajadores?alumnos en los sectores Agropecuario, Comercio y Servicios. Quizá la modificación fundamental sufrida por el método tuvo lugar a comienzos de la presente década, cuando se elevó el número de alumnos por grupo de 12 (número para el cual habían sido originalmente diseñados los talleres), a 25 6 30.
Otros métodos de Formación Profesional
La aplicación de la metodología analítica a otros modos de formación, distintos del aprendizaje, pero sobre todo a otros sectores económicos, diferentes del industrial moderno, no se realizó sin algunas dificultades; el problema no radica tanto en los principios del análisis ocupacional, que siguen siendo válidos si la formación profesional quiere responder a las necesidades reales de la empresa moderna, a la racionalización y operativización de sus puestos de trabajo; las dificultades residen más bien en la fase de aplicación de la metodología analítica: un sistema de formación que parte de la base de la existencia del taller y de unos ejercicios útiles fácilmente manipulables desde el punto de vista pedagógico, no siempre puede trasladarse con exactitud a actividades que manejan contenidos algo intangibles (como las de los sectores de comercio y servicios), o a medios y condiciones de producción no tan fácilmente controlables (como es el caso de las actividades agropecuarias). Esto hizo necesario realizar no pocas modificaciones en las aplicaciones del método, a fin de hacerlo viable en actividades distintas de aquellas para las cuales fue desarrollado.
En el sector comercial se adopta, hacia 1964, una metodología específica para el sector: La Empresa Comercial Didáctica, diseñada en Francia por la Cámara de Comercio de París y utilizada con éxito por el Servicio Nacional de Aprendizaje Comercial, SENAC, de Brasil. La empresa comercial didáctica está organizada de tal manera que desarrolla las actividades de una empresa comercial real, reproduce sus funciones y puestos de trabajo, tanto administrativos como de distribución y mercado, funciona de manera permanente, con papelería, operaciones, tareas y flujos de trabajo reales. La realización óptima de este tipo de metodología supone no solamente el análisis ocupacional, sino también un estudio operacional de las empresas del sector y viene a ser como una especie de taller para el aprendizaje comercial.
Los grandes centros de aprendizaje del sector agropecuario aparecen después de que se ha desarrollado la acción del SENA en los otros dos sectores. Para este tiempo ya se ha definido y reglamentado minuciosamente la metodología (acuerdo 4 de 1963), y su aplicación al sector se hace de una manera bastante rígida. Los aprendizajes agroindustriales (agricultura mecanizada y maquinaria agrícola) se realizan con el mismo método diseñado para la industria. Sin embargo, el problema metodológico para el sector agropecuario no se soluciona en los grandes centros: gran parte de las necesidades de formación profesional se encuentra en los sectores tradicionales de la agricultura, en regiones muy apartadas de los centros, donde los trabajadores no pueden abandonar la tierra para dedicarse a una formación de tiempo completo; además, los centros no reproducen sus condiciones reales de trabajo. Por eso, aún antes de la aparición de los centros agropecuarios, equipos ambulantes del SENA tienen que capacitar en los mismos sitios de trabajo, combinando formación profesional con asesoría al aparato productivo mismo, en una metodología intuitiva muchas veces, que es preludio de la metodología empleada años más tarde en los programas móviles.
Los sectores no modernos de la economía, especialmente los tradicionales, presentan dos características fundamentales. En primer lugar, la escasa división del trabajo no permite identificar puestos específicos de trabajo mediante una análisis ocupacional de tipo ortodoxo. En segunda instancia, los mismos trabajadores son muchas veces los dueños de los medios de producción, lo cual hace que, a su nivel, el trabajo se confunda con la gestión empresarial y el desarrollo comunitario con el desarrollo de los aparatos productivos. Estas características explican en buena parte por que fracasó la atención a estos sectores, cuando se quiso transportar mecánicamente la metodología diseñada para los grandes centros y la economía formal. Como se indica en otra parte la nueva metodología aplicada en los programas móviles trata de suplir estas deficiencias: 1) orientando el análisis ocupacional a identificar no puestos concretos de trabajo, sino productos terminales que puedan ser o sean elaborados en la zona, a fin de capacitar a los trabajadores para producir bienes o servicios concretos que en alguna manera puedan elevar los ingresos y, 2) mezclando técnicas de capacitación profesional con técnicas de asesoría de empresas, en programas integrales de asistencia y desarrollo de tecnologías apropiadas, que funcionan en coordinación con los programas móviles, como son el CEC (Capacitación Empresarial Campesina), para el sector rural y el IDSE (Instrucción de Desarrollo Social Empresarial) para el urbano.
Renovación Metodológica del SENA
Existen una serie de fenómenos y circunstancias nuevas, tales como los avances en las técnicas de producción, con el nacimiento de nuevos puestos de trabajo y la desaparición de otros; los avances de la tecnología y pedagogía educativas; el desarrollo de los medios masivos de comunicación; el consiguiente incremento de complejidad en la relación hombre?naturaleza y hombre?sociedad; la necesidad de multiplicar la acción del SENA, a fin de darle mayor eficacia y rentabilidad, y de llegar a sectores poblacionales que no tienen acceso directo a los servicios de la entidad, ante las necesidades siempre crecientes de formación profesional; la preocupación, al interior del SENA, por el anquilosamiento de la metodología con el consiguiente deterioro en la calidad de la formación profesional. Todos estos ingredientes hacen que el SENA comience a preocuparse, ya desde la década del sesenta, por la modernización y actualización de su metodología.
A partir de 1974 la labor de renovación metodológica se canaliza en dos líneas fundamentales de trabajo: proyectar los métodos clásicos de formación profesional hacia fuera de los centros, por medio de métodos desescolarizados; y, hacia el interior de los centros, desarrollar una metodología más específica de formación en la producción.
En la introducción de métodos desescolarizados se busca complementar la formación en el centro con el trabajo individual, de manera que el alumno se autoforme mediante el seguimiento de unidades, bibliografías y ayudas audiovisuales expresamente elaboradas para el caso, con la colaboración de un instructor asesor. De esta manera se puede multiplicar la acción del instructor, no requiriéndose su presencia de tiempo completo al frente de cada grupo y el aprendizaje se ajusta al ritmo de cada alumno en particular. A nivel nacional, se están comenzando a hacer experiencias con los siguientes métodos en concreto:
- La formación individual socializada (FIS) que combina técnicas de trabajo individual con trabajo en grupo, constituyéndose así en un estadio intermedio entre las técnicas grupales y las autoformativas.
- El método de autoformación con entrevista (MAE) quizá el más experimentado hasta el presente. Después de una introducción, cada alumno elabora y discute su plan de estudios y comienza a trabajar las unidades autoformativas una por una. Al terminar una serie tiene una entrevista evaluativa con el instructor; hecha la evaluación se le entregan las unidades siguientes. Al final hay una evaluación total. El instructor además de realizar con cada alumno las entrevistas, programa un tiempo específico de consultas concretas.
- La instrucción programada (IP) es el método más desescolarizado, ya que los paquetes de unidades contienen prácticamente todo lo que tiene que realizar el alumno, inclusive las auto?evaluaciones. Las características de este método permiten aplicarlo a programas de formación masiva a distancia; por ejemplo, en cursos por correspondencia.
- En la regional de Bogotá se ha comenzado a experimentar un método que combina las técnicas de MAE con el análisis de casos, llamado TICATAC (Técnica Instruccional compuesta de autoformación con texto y análisis de casos).
Un proyecto que tendrá que afectar de alguna manera la metodología de formación profesional es la política de la entidad de que los centros de formación profesional tengan una producción comercializable de bienes y/o servicios. Para ello se comienza a trabajar con un sistema de formación en la producción en algunos centros escogidos como pilotos para el proyecto nacional. Del resultado de esta experiencia saldrán modificaciones en las etapas lectivas y productivas del aprendizaje y en los ejercicios útiles de las unidades de enseñanza, lo cual posiblemente implicará una formación mucho más real, adaptada no sólo a puestos de trabajo sino a procesos concretos de producción.
El crecimiento de las necesidades de formación profesional hizo que la labor metodológica del SENA se redujera a diseñar análisis ocupacionales y monografías profesionales para los nuevos puestos de trabajo que se iban generando en los distintos sectores de la economía; sin embargo, la cantidad siempre creciente de estos documentos hacía cada vez más difícil su actualización permanente; monografías profesionales del sector agropecuario y metalmecánico, para no citar más que dos ejemplos, elaboradas en 1955 y 1959 respectivamente, servían todavía de fundamento, en 1975, para la formación profesional en dichos sectores, sin modificaciones en el contenido de sus correspondientes series metódicas; se perdió así, poco a poco, el aspecto "dinámico", definido como constitutivo integral de la metodología. A partir de 1976 se comienza un trabajo que tiene como intención recuperar la dinámica del análisis ocupacional, al menos en el sector industrial; el trabajo, denominado "análisis globales de puestos de trabajo", emplea herramientas más comprensivas y eficientes que las empleadas hasta ahora; se parte de diseños estadísticos, con muestras representativas del conjunto del sector industrial colombiano; así mismo, la sistematización de datos en el computador permite una mayor eficacia y posibilidades de continua actualización del programa. El objetivo del estudio es encontrar familias de oficios con tareas comunes, para desarrollar en torno a ellas módulos instruccionales de diversos tipos, unos más especializados, otros más genéricos y comunes, dentro de cada familia.
La renovación metodológica del SENA cuenta con el apoyo de varias dependencias de la Dirección General, dentro de la nueva estructura administrativa: desde el punto de vista investigativo, la función primordial de la división de Metodología es el estudio y experimentación sobre métodos y medios de formación profesional; la división de Formación tiene, entre otras funciones, la de coordinar la capacitación en métodos y técnicas del personal especializado del SENA; a un nivel más operativo, la división de Producción coordina los proyectos de formación en la producción y la división de Programación Didáctica coordina la elaboración concreta de análisis ocupacionales, series metódicas y unidades de enseñanza. En las regionales, el área operativa incluye, además de las unidades operativas, una unidad llamada de “servicios a la formación profesional”, que sirve de apoyo logístico a las unidades operativas, en lo referente a servicios al alumnado, capellanías, bibliotecas, materiales didácticos, etc.
Con este apoyo institucional, a nivel nacional y local, se viene trabajando en la elaboración de nuevas series metódicas, para oficios en los cuales la formación profesional se realiza por métodos nuevos. Muchas de las unidades ya se están empleando a nivel nacional. Igualmente, a fin de hacer experiencias concretas y de producir el material audiovisual que este impulso metodológico requiere, se han creado dos centrales didácticas, una en Bogotá y otra en Cali. Estas centrales funcionarán como una dependencia específica de las unidades de servicios a la formación profesional; la de Cali, contará con edificio e instalaciones propias; la de Bogotá funcionará en el sitio de la antigua unidad de medios; dichas centrales deben experimentar y producir para satisfacer la demanda nacional de medios audiovisuales para la formación profesional; se piensa dar énfasis a aquellos medios poco explotados hasta el momento, como son cine y televisión (circuito cerrado).
Conclusión
La transferencia de una tecnología concreta para la formación profesional, aplicada con éxito en otros países como Brasil y adaptada a la realidad concreta de nuestro país, gracias al sistema del análisis ocupacional, representa en su tiempo una verdadera revolución dentro del contexto de la educación colombiana. Sin embargo, la escasa compenetración existente entre los sistemas de formación profesional, en especial el SENA, y los sistemas educativos formales impidieron que los logros tuvieran una mayor relevancia. Como se ha visto, la actividad “metodológica2 de los primeros años de vida del SENA fue muy creadora, llegando inclusive a determinar e integrarse con otros aspectos claves del desarrollo institucional: construcción de centros, diseño de talleres, dotación de equipos y capacitación del personal humano. A partir del Acuerdo 4 de 1963 esta actividad se plasma en una serie de normas y disposiciones que tuvieron como primer objetivo sistematizar lo logrado a fin de unificar y clarificar criterios. Posteriormente, el crecimiento de la entidad hizo que se perdiera algo de primer ímpetu creador del cual en muchas ocasiones, sólo subsistieron las normas escritas que, a manera de fórmulas, permitían recorrer maquinalmente, los pasos del diseño y de la aplicación de la metodología analítica, para aplicarla a una realidad siempre cambiante. Hoy se impone el SENA la tarea de renovación metodológica, que es pieza integral de la modernización de la entidad emprendida a partir de 1974. El principio del análisis ocupacional permanece como punto de partida para la elaboración de nuevos conceptos de formación profesional: sólo él puede hacer que la capacitación responda a las necesidades concretas del crecimiento económico del país. Pero su aplicación necesita, como en sus orígenes, estar ligada a un sin número de factores; por eso la Entidad debe integrar el trabajo de análisis de las ocupaciones típicas de los sectores modernos e informales con la renovación de equipos, la investigación de los sectores más dinámicos de la economía, etc.