- Botero esculturas (1998)
- Salmona (1998)
- El sabor de Colombia (1994)
- Wayuú. Cultura del desierto colombiano (1998)
- Semana Santa en Popayán (1999)
- Cartagena de siempre (1992)
- Palacio de las Garzas (1999)
- Juan Montoya (1998)
- Aves de Colombia. Grabados iluminados del Siglo XVIII (1993)
- Alta Colombia. El esplendor de la montaña (1996)
- Artefactos. Objetos artesanales de Colombia (1992)
- Carros. El automovil en Colombia (1995)
- Espacios Comerciales. Colombia (1994)
- Cerros de Bogotá (2000)
- El Terremoto de San Salvador. Narración de un superviviente (2001)
- Manolo Valdés. La intemporalidad del arte (1999)
- Casa de Hacienda. Arquitectura en el campo colombiano (1997)
- Fiestas. Celebraciones y Ritos de Colombia (1995)
- Costa Rica. Pura Vida (2001)
- Luis Restrepo. Arquitectura (2001)
- Ana Mercedes Hoyos. Palenque (2001)
- La Moneda en Colombia (2001)
- Jardines de Colombia (1996)
- Una jornada en Macondo (1995)
- Retratos (1993)
- Atavíos. Raíces de la moda colombiana (1996)
- La ruta de Humboldt. Colombia - Venezuela (1994)
- Trópico. Visiones de la naturaleza colombiana (1997)
- Herederos de los Incas (1996)
- Casa Moderna. Medio siglo de arquitectura doméstica colombiana (1996)
- Bogotá desde el aire (1994)
- La vida en Colombia (1994)
- Casa Republicana. La bella época en Colombia (1995)
- Selva húmeda de Colombia (1990)
- Richter (1997)
- Por nuestros niños. Programas para su Proteccion y Desarrollo en Colombia (1990)
- Mariposas de Colombia (1991)
- Colombia tierra de flores (1990)
- Los países andinos desde el satélite (1995)
- Deliciosas frutas tropicales (1990)
- Arrecifes del Caribe (1988)
- Casa campesina. Arquitectura vernácula de Colombia (1993)
- Páramos (1988)
- Manglares (1989)
- Señor Ladrillo (1988)
- La última muerte de Wozzeck (2000)
- Historia del Café de Guatemala (2001)
- Casa Guatemalteca (1999)
- Silvia Tcherassi (2002)
- Ana Mercedes Hoyos. Retrospectiva (2002)
- Francisco Mejía Guinand (2002)
- Aves del Llano (1992)
- El año que viene vuelvo (1989)
- Museos de Bogotá (1989)
- El arte de la cocina japonesa (1996)
- Botero Dibujos (1999)
- Colombia Campesina (1989)
- Conflicto amazónico. 1932-1934 (1994)
- Débora Arango. Museo de Arte Moderno de Medellín (1986)
- La Sabana de Bogotá (1988)
- Casas de Embajada en Washington D.C. (2004)
- XVI Bienal colombiana de Arquitectura 1998 (1998)
- Visiones del Siglo XX colombiano. A través de sus protagonistas ya muertos (2003)
- Río Bogotá (1985)
- Jacanamijoy (2003)
- Álvaro Barrera. Arquitectura y Restauración (2003)
- Campos de Golf en Colombia (2003)
- Cartagena de Indias. Visión panorámica desde el aire (2003)
- Guadua. Arquitectura y Diseño (2003)
- Enrique Grau. Homenaje (2003)
- Mauricio Gómez. Con la mano izquierda (2003)
- Ignacio Gómez Jaramillo (2003)
- Tesoros del Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario. 350 años (2003)
- Manos en el arte colombiano (2003)
- Historia de la Fotografía en Colombia. Museo de Arte Moderno de Bogotá (1983)
- Arenas Betancourt. Un realista más allá del tiempo (1986)
- Los Figueroa. Aproximación a su época y a su pintura (1986)
- Andrés de Santa María (1985)
- Ricardo Gómez Campuzano (1987)
- El encanto de Bogotá (1987)
- Manizales de ayer. Album de fotografías (1987)
- Ramírez Villamizar. Museo de Arte Moderno de Bogotá (1984)
- La transformación de Bogotá (1982)
- Las fronteras azules de Colombia (1985)
- Botero en el Museo Nacional de Colombia. Nueva donación 2004 (2004)
- Gonzalo Ariza. Pinturas (1978)
- Grau. El pequeño viaje del Barón Von Humboldt (1977)
- Bogotá Viva (2004)
- Albergues del Libertador en Colombia. Banco de la República (1980)
- El Rey triste (1980)
- Gregorio Vásquez (1985)
- Ciclovías. Bogotá para el ciudadano (1983)
- Negret escultor. Homenaje (2004)
- Mefisto. Alberto Iriarte (2004)
- Suramericana. 60 Años de compromiso con la cultura (2004)
- Rostros de Colombia (1985)
- Flora de Los Andes. Cien especies del Altiplano Cundi-Boyacense (1984)
- Casa de Nariño (1985)
- Periodismo gráfico. Círculo de Periodistas de Bogotá (1984)
- Cien años de arte colombiano. 1886 - 1986 (1985)
- Pedro Nel Gómez (1981)
- Colombia amazónica (1988)
- Palacio de San Carlos (1986)
- Veinte años del Sena en Colombia. 1957-1977 (1978)
- Bogotá. Estructura y principales servicios públicos (1978)
- Colombia Parques Naturales (2006)
- Érase una vez Colombia (2005)
- Colombia 360°. Ciudades y pueblos (2006)
- Bogotá 360°. La ciudad interior (2006)
- Guatemala inédita (2006)
- Casa de Recreo en Colombia (2005)
- Manzur. Homenaje (2005)
- Gerardo Aragón (2009)
- Santiago Cárdenas (2006)
- Omar Rayo. Homenaje (2006)
- Beatriz González (2005)
- Casa de Campo en Colombia (2007)
- Luis Restrepo. construcciones (2007)
- Juan Cárdenas (2007)
- Luis Caballero. Homenaje (2007)
- Fútbol en Colombia (2007)
- Cafés de Colombia (2008)
- Colombia es Color (2008)
- Armando Villegas. Homenaje (2008)
- Manuel Hernández (2008)
- Alicia Viteri. Memoria digital (2009)
- Clemencia Echeverri. Sin respuesta (2009)
- Museo de Arte Moderno de Cartagena de Indias (2009)
- Agua. Riqueza de Colombia (2009)
- Volando Colombia. Paisajes (2009)
- Colombia en flor (2009)
- Medellín 360º. Cordial, Pujante y Bella (2009)
- Arte Internacional. Colección del Banco de la República (2009)
- Hugo Zapata (2009)
- Apalaanchi. Pescadores Wayuu (2009)
- Bogotá vuelo al pasado (2010)
- Grabados Antiguos de la Pontificia Universidad Javeriana. Colección Eduardo Ospina S. J. (2010)
- Orquídeas. Especies de Colombia (2010)
- Apartamentos. Bogotá (2010)
- Luis Caballero. Erótico (2010)
- Luis Fernando Peláez (2010)
- Aves en Colombia (2011)
- Pedro Ruiz (2011)
- El mundo del arte en San Agustín (2011)
- Cundinamarca. Corazón de Colombia (2011)
- El hundimiento de los Partidos Políticos Tradicionales venezolanos: El caso Copei (2014)
- Artistas por la paz (1986)
- Reglamento de uniformes, insignias, condecoraciones y distintivos para el personal de la Policía Nacional (2009)
- Historia de Bogotá. Tomo I - Conquista y Colonia (2007)
- Historia de Bogotá. Tomo II - Siglo XIX (2007)
- Academia Colombiana de Jurisprudencia. 125 Años (2019)
- Duque, su presidencia (2022)
Provincia del Magdalena Centro
Vista del río Magdalena desde Beltrán.
Provincia del Magdalena Centro.
Río Contador, Bituima.
Bosque de niebla, Guayabal de Síquima.
Pastizal en la vereda El Paraíso.
Parque central.
Municipio de Beltrán.
Río Magdalena.
Chiva.
Cabras.
Instituión Educativa Jaime Narváez, Paquiló.
Iglesia de San Luis.
Panorámica desde torre de Telecom.
Vía al alto de Lagunas.
Campesina de la zona.
La bicicleta, popular medio de transporte en el área rural.
Pozo en quebrada Calacuta.
Amigos.
Taller de artesanía en lana.
Artesanías en palo de café y guadua.
Vivienda rural.
Iglesia de Nuestra Señora de Belén.
Municipio de Bituima.
Morteros artesanales.
Papaya.
Calles de la población.
Vecino del lugar.
Canyoning en el río Contador.
Puente colgante sobre el río Síquima.
Laguna Bituima.
Mural.
Pato piscinero en Piscilandia.
Pavo real en Piscilandia.
Laguna en la hacienda Cambular.
Tortuga en la hacienda Cambular.
Venado en Piscilandia.
Vista panorámica del municipio.
Iglesia del Señor de la Salud.
Interior de la iglesia.
Vista de la población.
Municipio de Chaguaní.
Balneario en la quebrada La Vieja.
Hotel Posada de la Abuela.
Portón viejo.
Calle empinada.
Cerro Cerrocón.
Parque del Samán.
Reserva forestal de palma de cera, la segunda del país.
Grupo juvenil de danza.
Serpiente verde.
Panorámica urbana.
Fuente del parque central.
Aspecto nocturno de las calles.
Municipio de Guayabal de Sísquima.
Habitantes de la región.
Secadero parabólico de café.
Almácigo de café.
Río Síquima.
Bosque de niebla.
Petroglifo en la vereda Trinidad.
Cascada de San Luis.
Reservorio rural.
Petroglifo en la vereda Trinidad.
Viviendas típicas.
Adornos de fachada.
Casa campesina.
Municipio de Pulí.
Pareja del área rural.
Techos de lámina metálica.
Agricultor de la zona.
Alcaldía municipal e iglesia de Nuestra Señora del Rosario.
Ganado en finca.
Acción social de la Policía en fincas cafeteras.
Pozo petrolífero Pulí 7.
Panorámica del río Magdalena.
Fachadas coloridas.
Iglesia de San Juan Bautista.
Interior de la iglesia de San Juan Bautista.
Nomenclatura.
Municipio de San Juan de Rioseco.
Río Seco.
Calle central de San Juan.
Panorámica nocturna.
Agricultor.
Plazuela de La Pola.
Puente de La Libertad sobre el río Magdalena, Cambao.
Pozo Hondo en la quebrada Seca.
Tienda.
Vereda El Piñal.
Alto en las afueras del pueblo.
Café de Colombia.
Quebrada Calambata.
Pintor de las tradicionales "chivas”.
Parque central de los samanes.
Ventana.
Municipio de Vianí.
Cabra.
Iglesia de Nuestra Señora de La Candelaria.
Iguana en el parque central.
Árbol de papayuela.
Vista desde el alto de la Virgen.
Canchas múltiples.
Piscina municipal.
Provincia del Magdalena Centro
Capital: San Juan de Rioseco
Habitantes: 28.237
Municipios: Beltrán, Bituima, Chaguaní, Guayabal de Síquima, Pulí, San Juan de Rioseco y Vianí
Los municipios de la provincia de Magdalena Centro fueron fundados donde ya existían antiguos pueblos de indios y aunque algunos tienen ahora nombres españoles, todos tuvieron su nombre indígena previo, como es el caso de Beltrán, que solía llamarse Colombayma. La única excepción es Vianí, fundado ya bien entrada la Colonia. Los municipios de esta provincia que se encuentran en la ribera del Magdalena, están entre los más cálidos del departamento.
En Vianí hay altos cerros desde los que se puede ver buena parte de la provincia, y cuyos dos picos más elevados son el Pan de Azúcar y el Cerrocón. No lejos de ellos cae la cascada Calambato, que los visitantes usan como balneario. En realidad, toda quebrada, río o laguna de la provincia es susceptible de convertirse en balneario cuando las inclemencias del clima así lo ordenan. En efecto, lo dicho de Calambato puede decirse también de la cascada de San Luis en Guayabal de Síquima, la quebrada del Caracotal en Pulí, el río Contador en Bituima, la laguna Barrigona en San Juan de Rioseco, y de la ribera del río Magdalena que pertenece a la provincia de Magdalena Centro. Igualmente, casi todos los municipios de esta provincia, atrapada entre el río y la cordillera, tienen cerros altos donde las temperaturas bajan y la vista se extiende hasta el horizonte. Este es el caso del alto de Lagunas en Beltrán, de las piedras de Monguí en Guayabal, donde se practican deportes de aventura, y de la cuchilla Muchagua en San Juan de Rioseco. Por los senderos que atraviesan esos cerros para conectar las veredas es muy grato caminar. Algunos van por reservas naturales, como la de Montero en Chaguaní; otros trepan por cerros, como el Tabor en Pulí; y otros descienden hacia el río Magdalena, como el del puerto de La Barca en San Juan, cruzado por el puente de la Libertad. Otros pasan por largas escalinatas, como el alto de la Virgen en Guayabal; otros bordean petroglifos muiscas, como en Bituima; y otros más son caminos reales por los que alguna vez pasó el correo de los españoles, como el camino real de San Juan, que va hacia Beltrán.
En las tierras del Magdalena Centro crece el maíz y el café en proporciones similares. Hay municipios eminentemente cafeteros, como Vianí, San Juan y Chaguaní, donde incluso la cultura gira en torno al café y su recolección; hay otros dedicados al maíz, como Pulí, Bituima y Guayabal, en los que aún sobreviven antiguos molinos y donde el maíz integra gran parte de los platos típicos, que van desde la arepa de maíz pelado hasta el guarapo. Pero en todos los pueblos crecen la caña panelera y las frutas propias del clima, se crían cerdos y gallinas y se pescan los mismos peces en el mismo río. Por eso pueden compartir algunos de los platos favoritos, como la gallina criolla, el viudo de pescado y la chicha de palma.
Con esos platos y bebidas suelen amenizar las fiestas populares que en Magdalena Centro son particularmente originales. En Guayabal de Síquima es tal la cantidad de lechonas que se preparan para las fiestas del pueblo que estas podrían bautizarse en su honor. En Chaguaní tiene lugar el Festival del Soltero, que le ha merecido al municipio el apodo de “Tierra de Cupido”, y en el cual se forman muchas de las futuras familias del pueblo. En Pulí las ferias y fiestas culminan en una nutrida peregrinación a un cerro, para ver amanecer, y en Beltrán, la fiesta de la Virgen de la Canoa consiste en un multitudinario y conmovedor desfile de balsas por el río Magdalena.
Con excepción de esta fiesta fluvial, la mayoría de celebraciones ocurren frente a las iglesias de las plazas de los pueblos. Algunas antiguas y hermosas, como la de Nuestro Señor de la Salud en Chaguaní, no lejos de la cual hay una casa colonial en la que se dice nació la valiente Policarpa Salavarrieta; o la de Nuestra Señora del Rosario, en Pulí, también de origen colonial. La más antigua, sin embargo, es la de San Luis Beltrán, en Beltrán, frente a la cual se levantan las dos famosas ceibas centenarias de la población.
Municipio de Beltrán
Provincia: Magdalena Centro
Población: 1.908 habitantes
Altura cabecera: 231 msnm
Fecha de fundación: 1760
Extensión: 211 km2
Número de veredas: 8
Distancia a Bogotá: 162 km
Beltrán está localizado sobre el río Magdalena, frente al municipio de Ambalema, que pertenece al departamento del Tolima. Antiguamente Beltrán era un pueblo que sus habitantes, los muiscas, llamaban con el hermoso nombre de Colombayma y a través del cual pasaba el comercio del Magdalena. Posteriormente, en la Colonia, el pueblo fue bautizado nuevamente como Beltrán, nombre del encomendero de los indios que allí vivían.
Además del portentoso Magdalena, que en ese punto adquiere una especial magnificencia, en Beltrán vale la pena visitar el alto de Lagunas, desde donde se divisan el otro lado del río, los cerros El Tabor y las Ceibas, que coronan la parte occidental del municipio, de índole montañosa. El puerto posee también un ferry que transporta automóviles de un lado a otro del río.
Los habitantes de Beltrán viven principalmente de la pesca y de la agricultura, pues cultivan una amplia variedad de frutas para la venta y el consumo. También crían ganado, del que obtienen leche y carne suficiente para el consumo. Sin embargo, la ganadería es relativamente nueva para los habitantes de Beltrán que prefieren el viudo de pescado sobre cualquier otro plato.
En la plaza central del pueblo, frente a la iglesia San Luis Beltrán, una de las más antiguas del país, hay dos enormes ceibas que llevan allí muchos más años que el más viejo de sus habitantes y, por lo tanto, se han convertido en símbolo del municipio. Cerca de la plaza también hay una biblioteca pública que los jóvenes consultan a diario y un museo de cerámica indígena, donde se solazan las personas que visitan el lugar.
Beltrán celebra en septiembre la Fiesta de la Virgen de la Canoa, uno de los espectáculos más especiales de toda la región. En ella habitantes y turistas participan en una multitudinaria procesión en barcazas que surcan las aguas del río Magdalena.
Municipio de Bituima
Provincia: Magdalena Centro
Población: 2.565 habitantes
Altura cabecera: 1.412 msnm
Fecha de fundación: 1627
Extensión: 61 km2
Número de veredas: 16
Distancia a Bogotá: 112 km
Bituima se localiza sobre un moderado cerro, en una parte más bien plana de la Cordillera Oriental, por lo que se puede observar a la distancia. Era un pueblo panche que estaba sobre la ruta de comercio indígena entre el río Magdalena y la Sabana de Bogotá y, por lo tanto, tenía una gran importancia en la región.
De esas épocas quedan varios petroglifos, de los cuales los mejor conservados son los de Soledad y los más deteriorados los de Monguí y La Concordia. Los visitantes que llegan al municipio suelen pasar por los petroglifos en su camino al salto del río Contador, balneario ideal por sus aguas mansas y su entorno natural. Sin embargo, la vegetación en otras regiones del municipio no es tan abundante ya que la deforestación y la quema de bosques para la siembra de maíz han acabado con parte del ecosistema, por lo que ya se han puesto en marcha varios proyectos de reforestación.
Hoy día los habitantes de Bituima tienen maíz y caña de azúcar y crían cerdos y aves, especialmente gallinas ponedoras. Por eso la gastronomía del municipio consiste en sancocho de gallina, fritanga, masato de maíz y guarapo de caña que se consume durante las fiestas patronales, en las que sobresale el Festival de Música Popular Campesina, que se celebra en abril, fecha en la cual los músicos de las regiones cercanas demuestran sus habilidades en la ejecución de instrumentos típicos. En agosto se conmemora el cumpleaños del pueblo y la música vuelve a la tarima, esta vez en la plaza central, frente al templo de San Patricio, una bella edificación que debió ser clausurada desde el año 2006 cuando, durante las celebraciones del Domingo de Ramos, un fuerte vendaval se llevó el techo.
Municipio de Chaguaní
Provincia: Magdalena Centro
Población: 3.935 habitantes
Altura cabecera: 1.200 msnm
Fecha de fundación: 1770
Extensión: 167 km2
Número de veredas: 15
Distancia a Bogotá: 121 km
Chaguaní se encuentra ubicada a pocos kilómetros del río Magdalena, sobre las primeras estribaciones orientales de la cordillera, y fue un importante poblado de indios antes de la llegada de los españoles. En lengua chibcha, Chaguaní quiere decir “varón del cerro de oro”.
Chaguaní es un municipio ideal para caminar y para andar a caballo. En la reserva de la vereda Montero, a la cual se puede llegar después de una espectacular caminata desde el pueblo, los visitantes suelen alquilar caballos para seguir el camino hacia los confines del municipio que no es pequeño. Otra caminata, la del Cerrocón, llega hasta un cerro que hace de mirador sobre gran parte de la región circundante y que es en sí mismo un paraje entrañable. No lejos de ese cerro se encuentra la segunda gran reserva de palma de cera del país, de la que los habitantes de este pueblo están orgullosos pues es el árbol nacional y su cuna es Chaguaní.
En sus tierras se produce la caña panelera, el banano, el café y una gran variedad de frutas, lo que da una idea no solo de su cálido clima, sino de su gastronomía. Entre los platos favoritos de los campesinos, al igual que en otros tantos pueblos de Cundinamarca, están la gallina criolla, el pan resobado y el piquete. Aunque en Chaguaní se produce una rica gama de árboles frutales, los habitantes de Chaguaní durante las ferias y fiestas, que se celebran en junio, prefieren la gallina y el piquete. En mayo se realiza el Festival del Soltero, curiosa celebración que le ha merecido a este municipio uno de sus apodos más pintorescos, “tierra de Cupido”.
Tales fiestas se celebran en la plaza central, frente a la iglesia de Nuestro Señor de la Salud, donde hay una imagen del Señor traída de España en el siglo xvii. No lejos de allí está la casa llamada La Polonia, en la que, según se dice, nació Policarpa Salavarrieta, un honor que el municipio se disputa con Guaduas.
Municipio de Guayabal de Síquima
Provincia: Magdalena Centro
Población: 3.538 habitantes
Altura cabecera: 1.630 msnm
Fecha de fundación: 1604
Extensión: 59 km2
Número de veredas: 11
Distancia a Bogotá: 70 km
Durante los primeros siglos de la Colonia, Guayabal era un pueblo de blancos, fundado por los españoles y en donde, debido a su ubicación, tan lejana de la capital y del río Magdalena, el número de habitantes no creció como era necesario. Como vecino a Guayabal existía un pueblo de indios llamado Síquima, cuya situación era parecida, los dos poblados se unieron y adoptaron un nombre que diera cuenta de esa unión.
Hoy en día, aunque la población no ha crecido exageradamente, sí ha aumentado el número de visitantes que frecuentan el municipio motivados por distintos intereses. La mayoría va directo a las piedras de Monguí, en las que suelen escalar y practicar deportes de aventura. Otros, sin embargo, prefieren los paisajes solitarios del Alto de la Virgen o las llamadas escalinatas del templo para dar largas caminatas en contacto directo con la naturaleza. También son bastante concurridas las misteriosas cavernas del Encanto, cuya visita se complementa muy bien con un baño en la cascada de San Luis. Otros más prefieren recorrer las calles del pueblo y visitar la iglesia de la Inmaculada Concepción, así como algunas de las casas y plazas más viejas.
En los campos de Guayabal se conservan algunas reliquias históricas, como sus antiguos y en general bien conservados molinos, en los cuales se procesa el trigo, principal producto agrícola del municipio, aunque hayan sido varios los esfuerzos recientes por diversificar la producción. Como los campesinos de Guayabal también practican la crianza de cerdos, el pueblo se llena de ventas de lechona y de fritanga durante las fiestas patronales, la Semana Santa y los festivales de música y de danza, en los cuales los habitantes y los visitantes disfrutan de la comida, los espectáculos y el fresco aire de montaña que el municipio ofrece.
Municipio de Pulí
Provincia: Magdalena Centro
Población: 2.837 habitantes
Altura cabecera: 1.270 msnm
Fecha de fundación: 1800
Extensión: 178 km2
Número de veredas: 18
Distancia a Bogotá: 143 km
El municipio de Pulí se encuentra sobre la última estribación de la Cordillera Oriental antes de llegar al río Magdalena, en una región baja pero montañosa, cálida y atravesada por decenas de quebradas, cuyas aguas irrigan las tierras del municipio, de las cuales la más importante es la quebrada del Caracotal. Pulí era un pueblo de indios panches antes de ser conquistado por los españoles, quienes construyeron durante la Colonia la primera iglesia de Nuestra Señora del Rosario, en la plaza central del pueblo.
Desde esa plaza son varios los caminos que conducen a las diversas veredas, la mayoría de los cuales suelen ser transitados por los visitantes que aprovechan la caminata para conocer de cerca el variado paisaje natural, tan rico en vegetación gracias a la abundancia de agua. El alto de las Lagunas es un atractivo natural, desde donde se divisa una panorámica del Magdalena. ?El municipio tiene además varios pozos petroleros activos.
En las tierras de Pulí, desde el cerro El Tabor, que circunda el municipio, hasta la ribera del Magdalena, crecen algunos tubérculos pero ninguno en igual cantidad que el maíz. En Pulí el maíz es el protagonista casi único de la actividad agrícola, comercial y culinaria. De ahí que en el menú típico de sus habitantes figuren la arepa de "maíz pelao", los envueltos de maíz, la mazamorra y el guarapo. También el viudo de pescado, el cuchuco, la chicha de palma de cuesco o de arracacha y la gallina criolla son algunos de los platos favoritos de los comensales del pueblo.
Esos platos y esas bebidas suelen ocupar los estantes de puestos y restaurantes durante las ferias y fiestas de Pulí, que se celebran en agosto, durante las cuales los espectáculos reúnen fuegos artificiales, presentaciones musicales, de danza y a veces de teatro, y corridas de toros por las que los habitantes tienen una vieja pasión. Un curioso ritual hace de estas fiestas un evento único en la región y es costumbre de los habitantes quedarse despiertos para ir todos juntos a las montañas a ver el amanecer.
Municipio de San Juan de Rioseco
Provincia: Magdalena Centro
Población: 9.462 habitantes
Altura cabecera: 1.303 msnm
Fecha de fundación: 1801
Extensión: 327 km2
Número de veredas: 12
Distancia a Bogotá: 117 km
El municipio de San Juan de Rioseco se encuentra en el piedemonte de la Cordillera Oriental, que desciende hacia la cuenca del río Magdalena y lo separa del vecino departamento del Tolima. El nombre del municipio se debe a la conjunción de su santo patrono y al hecho de que en sus montañas se encuentre el nacimiento del río Seco, una de las principales fuentes hídricas de la región.
Los turistas y viajeros que llegan al municipio suelen visitar el río y la hermosa vegetación que lo circunda, pero también llevan su recorrido hacia los puertos de La Barca y Las Mudas, en la inspección de Cambao, sobre el río Magdalena; al puente de la Libertad, que lo cruza; y hacia el camino real que conduce a Beltrán. Del lado montañoso de San Juan vale la pena visitar la laguna La Barrigona y las cuchillas de Peñas Blancas y Muchagua, desde la cual, si el día está despejado, se divisa casi todo el municipio, hasta la ribera del Magdalena.
La altura media y el clima templado de San Juan son ideales para el cultivo del café y para la ganadería, que son sus dos principales actividades comerciales. Sin embargo, los campesinos de San Juan también cultivan verduras como arveja, aguacate, tomate, maíz y yuca, y frutas como naranja, mandarina, mango y banano. La cocina del municipio ofrece una variada gama de jugos naturales y de cocidos de verduras y de ciertas carnes, como el viudo de pescado y la gallina favorita, que es sin duda el plato preferido.
En el pueblo de San José hay una plaza de toros colonial que vale la pena visitar, al igual que la vieja estación del ferrocarril que se halla bien conservada. Cerca de esos dos edificios y en la plaza central, los habitantes de San José celebran en junio sus ferias y fiestas, en que comparten sus platos tradicionales y descansan, con música y danza, del difícil trabajo en el campo.
Municipio de Vianí
Provincia: Magdalena Centro
Población: 3.992 habitantes
Altura cabecera: 1.498 msnm
Fecha de fundación: 1843
Extensión: 68 km2
Número de veredas: 13
Distancia a Bogotá: 107 km
A medio camino entre la Sabana de Bogotá y el río Magdalena, el municipio de Vianí se extiende sobre una larga y alta estribación de la Cordillera Oriental. Su nombre le fue otorgado a finales del siglo xix en honor de un general del ejército de nombre Viana, que posteriormente fue adaptado a la sonoridad típica de los nombres de pueblos indios, pero se desconoce si la adaptación surgió naturalmente o se originó en alguna intención política particular.
Sobre esa larga cordillera que demarca el municipio se destacan el Coné y el Pan de Azúcar, dos elevados cerros que caracterizan el paisaje que se ve desde el pueblo y desde los cuales se observa todo el municipio. Aunque no alcanzan el piso térmico del páramo, los cerros tienen una densa y húmeda vegetación, poco explotada y crucial para el sustento hídrico y maderero de Vianí. Cerca de ellos nacen varias quebradas y el río Contador, principal fuente de agua y destino turístico de los habitantes del municipio que suelen frecuentar en familia la cascada Calambato, su balneario favorito.
En los campos de Vianí crecen el plátano, uno de los principales productos de la cocina del municipio, lo mismo que el café, sobre el cual gira su economía. Con el café los campesinos de Vianí adquieren en los municipios vecinos los productos que les hacen falta, por lo cual su identidad se ha formado en gran medida alrededor de este cultivo.
Las ferias y fiestas de Vianí, que se celebran en junio, tienen como protagonista el café y todos los usos y costumbres que trae consigo. Los habitantes de Vianí también celebran el Festival de Bandas Folclóricas en noviembre, durante el cual la música irrumpe en los alrededores de la plaza principal.
Las "chivas" tradicionales, con sus coloridas carrocerías, recorren el municipio y sus alrededores, cumpliendo la función de buses escolares, con
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Vista del río Magdalena desde Beltrán.
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Panorámica desde torre de Telecom.
Vía al alto de Lagunas.
Campesina de la zona.
La bicicleta, popular medio de transporte en el área rural.
Pozo en quebrada Calacuta.
Amigos.
Taller de artesanía en lana.
Artesanías en palo de café y guadua.
Vivienda rural.
Iglesia de Nuestra Señora de Belén.
Municipio de Bituima.
Morteros artesanales.
Papaya.
Calles de la población.
Vecino del lugar.
Canyoning en el río Contador.
Puente colgante sobre el río Síquima.
Laguna Bituima.
Mural.
Pato piscinero en Piscilandia.
Pavo real en Piscilandia.
Laguna en la hacienda Cambular.
Tortuga en la hacienda Cambular.
Venado en Piscilandia.
Vista panorámica del municipio.
Iglesia del Señor de la Salud.
Interior de la iglesia.
Vista de la población.
Municipio de Chaguaní.
Balneario en la quebrada La Vieja.
Hotel Posada de la Abuela.
Portón viejo.
Calle empinada.
Cerro Cerrocón.
Parque del Samán.
Reserva forestal de palma de cera, la segunda del país.
Grupo juvenil de danza.
Serpiente verde.
Panorámica urbana.
Fuente del parque central.
Aspecto nocturno de las calles.
Municipio de Guayabal de Sísquima.
Habitantes de la región.
Secadero parabólico de café.
Almácigo de café.
Río Síquima.
Bosque de niebla.
Petroglifo en la vereda Trinidad.
Cascada de San Luis.
Reservorio rural.
Petroglifo en la vereda Trinidad.
Viviendas típicas.
Adornos de fachada.
Casa campesina.
Municipio de Pulí.
Pareja del área rural.
Techos de lámina metálica.
Agricultor de la zona.
Alcaldía municipal e iglesia de Nuestra Señora del Rosario.
Ganado en finca.
Acción social de la Policía en fincas cafeteras.
Pozo petrolífero Pulí 7.
Panorámica del río Magdalena.
Fachadas coloridas.
Iglesia de San Juan Bautista.
Interior de la iglesia de San Juan Bautista.
Nomenclatura.
Municipio de San Juan de Rioseco.
Río Seco.
Calle central de San Juan.
Panorámica nocturna.
Agricultor.
Plazuela de La Pola.
Puente de La Libertad sobre el río Magdalena, Cambao.
Pozo Hondo en la quebrada Seca.
Tienda.
Vereda El Piñal.
Alto en las afueras del pueblo.
Café de Colombia.
Quebrada Calambata.
Pintor de las tradicionales "chivas”.
Parque central de los samanes.
Ventana.
Municipio de Vianí.
Cabra.
Iglesia de Nuestra Señora de La Candelaria.
Iguana en el parque central.
Árbol de papayuela.
Vista desde el alto de la Virgen.
Canchas múltiples.
Piscina municipal.
Provincia del Magdalena Centro
Capital: San Juan de Rioseco
Habitantes: 28.237
Municipios: Beltrán, Bituima, Chaguaní, Guayabal de Síquima, Pulí, San Juan de Rioseco y Vianí
Los municipios de la provincia de Magdalena Centro fueron fundados donde ya existían antiguos pueblos de indios y aunque algunos tienen ahora nombres españoles, todos tuvieron su nombre indígena previo, como es el caso de Beltrán, que solía llamarse Colombayma. La única excepción es Vianí, fundado ya bien entrada la Colonia. Los municipios de esta provincia que se encuentran en la ribera del Magdalena, están entre los más cálidos del departamento.
En Vianí hay altos cerros desde los que se puede ver buena parte de la provincia, y cuyos dos picos más elevados son el Pan de Azúcar y el Cerrocón. No lejos de ellos cae la cascada Calambato, que los visitantes usan como balneario. En realidad, toda quebrada, río o laguna de la provincia es susceptible de convertirse en balneario cuando las inclemencias del clima así lo ordenan. En efecto, lo dicho de Calambato puede decirse también de la cascada de San Luis en Guayabal de Síquima, la quebrada del Caracotal en Pulí, el río Contador en Bituima, la laguna Barrigona en San Juan de Rioseco, y de la ribera del río Magdalena que pertenece a la provincia de Magdalena Centro. Igualmente, casi todos los municipios de esta provincia, atrapada entre el río y la cordillera, tienen cerros altos donde las temperaturas bajan y la vista se extiende hasta el horizonte. Este es el caso del alto de Lagunas en Beltrán, de las piedras de Monguí en Guayabal, donde se practican deportes de aventura, y de la cuchilla Muchagua en San Juan de Rioseco. Por los senderos que atraviesan esos cerros para conectar las veredas es muy grato caminar. Algunos van por reservas naturales, como la de Montero en Chaguaní; otros trepan por cerros, como el Tabor en Pulí; y otros descienden hacia el río Magdalena, como el del puerto de La Barca en San Juan, cruzado por el puente de la Libertad. Otros pasan por largas escalinatas, como el alto de la Virgen en Guayabal; otros bordean petroglifos muiscas, como en Bituima; y otros más son caminos reales por los que alguna vez pasó el correo de los españoles, como el camino real de San Juan, que va hacia Beltrán.
En las tierras del Magdalena Centro crece el maíz y el café en proporciones similares. Hay municipios eminentemente cafeteros, como Vianí, San Juan y Chaguaní, donde incluso la cultura gira en torno al café y su recolección; hay otros dedicados al maíz, como Pulí, Bituima y Guayabal, en los que aún sobreviven antiguos molinos y donde el maíz integra gran parte de los platos típicos, que van desde la arepa de maíz pelado hasta el guarapo. Pero en todos los pueblos crecen la caña panelera y las frutas propias del clima, se crían cerdos y gallinas y se pescan los mismos peces en el mismo río. Por eso pueden compartir algunos de los platos favoritos, como la gallina criolla, el viudo de pescado y la chicha de palma.
Con esos platos y bebidas suelen amenizar las fiestas populares que en Magdalena Centro son particularmente originales. En Guayabal de Síquima es tal la cantidad de lechonas que se preparan para las fiestas del pueblo que estas podrían bautizarse en su honor. En Chaguaní tiene lugar el Festival del Soltero, que le ha merecido al municipio el apodo de “Tierra de Cupido”, y en el cual se forman muchas de las futuras familias del pueblo. En Pulí las ferias y fiestas culminan en una nutrida peregrinación a un cerro, para ver amanecer, y en Beltrán, la fiesta de la Virgen de la Canoa consiste en un multitudinario y conmovedor desfile de balsas por el río Magdalena.
Con excepción de esta fiesta fluvial, la mayoría de celebraciones ocurren frente a las iglesias de las plazas de los pueblos. Algunas antiguas y hermosas, como la de Nuestro Señor de la Salud en Chaguaní, no lejos de la cual hay una casa colonial en la que se dice nació la valiente Policarpa Salavarrieta; o la de Nuestra Señora del Rosario, en Pulí, también de origen colonial. La más antigua, sin embargo, es la de San Luis Beltrán, en Beltrán, frente a la cual se levantan las dos famosas ceibas centenarias de la población.
Municipio de Beltrán
Provincia: Magdalena Centro
Población: 1.908 habitantes
Altura cabecera: 231 msnm
Fecha de fundación: 1760
Extensión: 211 km2
Número de veredas: 8
Distancia a Bogotá: 162 km
Beltrán está localizado sobre el río Magdalena, frente al municipio de Ambalema, que pertenece al departamento del Tolima. Antiguamente Beltrán era un pueblo que sus habitantes, los muiscas, llamaban con el hermoso nombre de Colombayma y a través del cual pasaba el comercio del Magdalena. Posteriormente, en la Colonia, el pueblo fue bautizado nuevamente como Beltrán, nombre del encomendero de los indios que allí vivían.
Además del portentoso Magdalena, que en ese punto adquiere una especial magnificencia, en Beltrán vale la pena visitar el alto de Lagunas, desde donde se divisan el otro lado del río, los cerros El Tabor y las Ceibas, que coronan la parte occidental del municipio, de índole montañosa. El puerto posee también un ferry que transporta automóviles de un lado a otro del río.
Los habitantes de Beltrán viven principalmente de la pesca y de la agricultura, pues cultivan una amplia variedad de frutas para la venta y el consumo. También crían ganado, del que obtienen leche y carne suficiente para el consumo. Sin embargo, la ganadería es relativamente nueva para los habitantes de Beltrán que prefieren el viudo de pescado sobre cualquier otro plato.
En la plaza central del pueblo, frente a la iglesia San Luis Beltrán, una de las más antiguas del país, hay dos enormes ceibas que llevan allí muchos más años que el más viejo de sus habitantes y, por lo tanto, se han convertido en símbolo del municipio. Cerca de la plaza también hay una biblioteca pública que los jóvenes consultan a diario y un museo de cerámica indígena, donde se solazan las personas que visitan el lugar.
Beltrán celebra en septiembre la Fiesta de la Virgen de la Canoa, uno de los espectáculos más especiales de toda la región. En ella habitantes y turistas participan en una multitudinaria procesión en barcazas que surcan las aguas del río Magdalena.
Municipio de Bituima
Provincia: Magdalena Centro
Población: 2.565 habitantes
Altura cabecera: 1.412 msnm
Fecha de fundación: 1627
Extensión: 61 km2
Número de veredas: 16
Distancia a Bogotá: 112 km
Bituima se localiza sobre un moderado cerro, en una parte más bien plana de la Cordillera Oriental, por lo que se puede observar a la distancia. Era un pueblo panche que estaba sobre la ruta de comercio indígena entre el río Magdalena y la Sabana de Bogotá y, por lo tanto, tenía una gran importancia en la región.
De esas épocas quedan varios petroglifos, de los cuales los mejor conservados son los de Soledad y los más deteriorados los de Monguí y La Concordia. Los visitantes que llegan al municipio suelen pasar por los petroglifos en su camino al salto del río Contador, balneario ideal por sus aguas mansas y su entorno natural. Sin embargo, la vegetación en otras regiones del municipio no es tan abundante ya que la deforestación y la quema de bosques para la siembra de maíz han acabado con parte del ecosistema, por lo que ya se han puesto en marcha varios proyectos de reforestación.
Hoy día los habitantes de Bituima tienen maíz y caña de azúcar y crían cerdos y aves, especialmente gallinas ponedoras. Por eso la gastronomía del municipio consiste en sancocho de gallina, fritanga, masato de maíz y guarapo de caña que se consume durante las fiestas patronales, en las que sobresale el Festival de Música Popular Campesina, que se celebra en abril, fecha en la cual los músicos de las regiones cercanas demuestran sus habilidades en la ejecución de instrumentos típicos. En agosto se conmemora el cumpleaños del pueblo y la música vuelve a la tarima, esta vez en la plaza central, frente al templo de San Patricio, una bella edificación que debió ser clausurada desde el año 2006 cuando, durante las celebraciones del Domingo de Ramos, un fuerte vendaval se llevó el techo.
Municipio de Chaguaní
Provincia: Magdalena Centro
Población: 3.935 habitantes
Altura cabecera: 1.200 msnm
Fecha de fundación: 1770
Extensión: 167 km2
Número de veredas: 15
Distancia a Bogotá: 121 km
Chaguaní se encuentra ubicada a pocos kilómetros del río Magdalena, sobre las primeras estribaciones orientales de la cordillera, y fue un importante poblado de indios antes de la llegada de los españoles. En lengua chibcha, Chaguaní quiere decir “varón del cerro de oro”.
Chaguaní es un municipio ideal para caminar y para andar a caballo. En la reserva de la vereda Montero, a la cual se puede llegar después de una espectacular caminata desde el pueblo, los visitantes suelen alquilar caballos para seguir el camino hacia los confines del municipio que no es pequeño. Otra caminata, la del Cerrocón, llega hasta un cerro que hace de mirador sobre gran parte de la región circundante y que es en sí mismo un paraje entrañable. No lejos de ese cerro se encuentra la segunda gran reserva de palma de cera del país, de la que los habitantes de este pueblo están orgullosos pues es el árbol nacional y su cuna es Chaguaní.
En sus tierras se produce la caña panelera, el banano, el café y una gran variedad de frutas, lo que da una idea no solo de su cálido clima, sino de su gastronomía. Entre los platos favoritos de los campesinos, al igual que en otros tantos pueblos de Cundinamarca, están la gallina criolla, el pan resobado y el piquete. Aunque en Chaguaní se produce una rica gama de árboles frutales, los habitantes de Chaguaní durante las ferias y fiestas, que se celebran en junio, prefieren la gallina y el piquete. En mayo se realiza el Festival del Soltero, curiosa celebración que le ha merecido a este municipio uno de sus apodos más pintorescos, “tierra de Cupido”.
Tales fiestas se celebran en la plaza central, frente a la iglesia de Nuestro Señor de la Salud, donde hay una imagen del Señor traída de España en el siglo xvii. No lejos de allí está la casa llamada La Polonia, en la que, según se dice, nació Policarpa Salavarrieta, un honor que el municipio se disputa con Guaduas.
Municipio de Guayabal de Síquima
Provincia: Magdalena Centro
Población: 3.538 habitantes
Altura cabecera: 1.630 msnm
Fecha de fundación: 1604
Extensión: 59 km2
Número de veredas: 11
Distancia a Bogotá: 70 km
Durante los primeros siglos de la Colonia, Guayabal era un pueblo de blancos, fundado por los españoles y en donde, debido a su ubicación, tan lejana de la capital y del río Magdalena, el número de habitantes no creció como era necesario. Como vecino a Guayabal existía un pueblo de indios llamado Síquima, cuya situación era parecida, los dos poblados se unieron y adoptaron un nombre que diera cuenta de esa unión.
Hoy en día, aunque la población no ha crecido exageradamente, sí ha aumentado el número de visitantes que frecuentan el municipio motivados por distintos intereses. La mayoría va directo a las piedras de Monguí, en las que suelen escalar y practicar deportes de aventura. Otros, sin embargo, prefieren los paisajes solitarios del Alto de la Virgen o las llamadas escalinatas del templo para dar largas caminatas en contacto directo con la naturaleza. También son bastante concurridas las misteriosas cavernas del Encanto, cuya visita se complementa muy bien con un baño en la cascada de San Luis. Otros más prefieren recorrer las calles del pueblo y visitar la iglesia de la Inmaculada Concepción, así como algunas de las casas y plazas más viejas.
En los campos de Guayabal se conservan algunas reliquias históricas, como sus antiguos y en general bien conservados molinos, en los cuales se procesa el trigo, principal producto agrícola del municipio, aunque hayan sido varios los esfuerzos recientes por diversificar la producción. Como los campesinos de Guayabal también practican la crianza de cerdos, el pueblo se llena de ventas de lechona y de fritanga durante las fiestas patronales, la Semana Santa y los festivales de música y de danza, en los cuales los habitantes y los visitantes disfrutan de la comida, los espectáculos y el fresco aire de montaña que el municipio ofrece.
Municipio de Pulí
Provincia: Magdalena Centro
Población: 2.837 habitantes
Altura cabecera: 1.270 msnm
Fecha de fundación: 1800
Extensión: 178 km2
Número de veredas: 18
Distancia a Bogotá: 143 km
El municipio de Pulí se encuentra sobre la última estribación de la Cordillera Oriental antes de llegar al río Magdalena, en una región baja pero montañosa, cálida y atravesada por decenas de quebradas, cuyas aguas irrigan las tierras del municipio, de las cuales la más importante es la quebrada del Caracotal. Pulí era un pueblo de indios panches antes de ser conquistado por los españoles, quienes construyeron durante la Colonia la primera iglesia de Nuestra Señora del Rosario, en la plaza central del pueblo.
Desde esa plaza son varios los caminos que conducen a las diversas veredas, la mayoría de los cuales suelen ser transitados por los visitantes que aprovechan la caminata para conocer de cerca el variado paisaje natural, tan rico en vegetación gracias a la abundancia de agua. El alto de las Lagunas es un atractivo natural, desde donde se divisa una panorámica del Magdalena. ?El municipio tiene además varios pozos petroleros activos.
En las tierras de Pulí, desde el cerro El Tabor, que circunda el municipio, hasta la ribera del Magdalena, crecen algunos tubérculos pero ninguno en igual cantidad que el maíz. En Pulí el maíz es el protagonista casi único de la actividad agrícola, comercial y culinaria. De ahí que en el menú típico de sus habitantes figuren la arepa de "maíz pelao", los envueltos de maíz, la mazamorra y el guarapo. También el viudo de pescado, el cuchuco, la chicha de palma de cuesco o de arracacha y la gallina criolla son algunos de los platos favoritos de los comensales del pueblo.
Esos platos y esas bebidas suelen ocupar los estantes de puestos y restaurantes durante las ferias y fiestas de Pulí, que se celebran en agosto, durante las cuales los espectáculos reúnen fuegos artificiales, presentaciones musicales, de danza y a veces de teatro, y corridas de toros por las que los habitantes tienen una vieja pasión. Un curioso ritual hace de estas fiestas un evento único en la región y es costumbre de los habitantes quedarse despiertos para ir todos juntos a las montañas a ver el amanecer.
Municipio de San Juan de Rioseco
Provincia: Magdalena Centro
Población: 9.462 habitantes
Altura cabecera: 1.303 msnm
Fecha de fundación: 1801
Extensión: 327 km2
Número de veredas: 12
Distancia a Bogotá: 117 km
El municipio de San Juan de Rioseco se encuentra en el piedemonte de la Cordillera Oriental, que desciende hacia la cuenca del río Magdalena y lo separa del vecino departamento del Tolima. El nombre del municipio se debe a la conjunción de su santo patrono y al hecho de que en sus montañas se encuentre el nacimiento del río Seco, una de las principales fuentes hídricas de la región.
Los turistas y viajeros que llegan al municipio suelen visitar el río y la hermosa vegetación que lo circunda, pero también llevan su recorrido hacia los puertos de La Barca y Las Mudas, en la inspección de Cambao, sobre el río Magdalena; al puente de la Libertad, que lo cruza; y hacia el camino real que conduce a Beltrán. Del lado montañoso de San Juan vale la pena visitar la laguna La Barrigona y las cuchillas de Peñas Blancas y Muchagua, desde la cual, si el día está despejado, se divisa casi todo el municipio, hasta la ribera del Magdalena.
La altura media y el clima templado de San Juan son ideales para el cultivo del café y para la ganadería, que son sus dos principales actividades comerciales. Sin embargo, los campesinos de San Juan también cultivan verduras como arveja, aguacate, tomate, maíz y yuca, y frutas como naranja, mandarina, mango y banano. La cocina del municipio ofrece una variada gama de jugos naturales y de cocidos de verduras y de ciertas carnes, como el viudo de pescado y la gallina favorita, que es sin duda el plato preferido.
En el pueblo de San José hay una plaza de toros colonial que vale la pena visitar, al igual que la vieja estación del ferrocarril que se halla bien conservada. Cerca de esos dos edificios y en la plaza central, los habitantes de San José celebran en junio sus ferias y fiestas, en que comparten sus platos tradicionales y descansan, con música y danza, del difícil trabajo en el campo.
Municipio de Vianí
Provincia: Magdalena Centro
Población: 3.992 habitantes
Altura cabecera: 1.498 msnm
Fecha de fundación: 1843
Extensión: 68 km2
Número de veredas: 13
Distancia a Bogotá: 107 km
A medio camino entre la Sabana de Bogotá y el río Magdalena, el municipio de Vianí se extiende sobre una larga y alta estribación de la Cordillera Oriental. Su nombre le fue otorgado a finales del siglo xix en honor de un general del ejército de nombre Viana, que posteriormente fue adaptado a la sonoridad típica de los nombres de pueblos indios, pero se desconoce si la adaptación surgió naturalmente o se originó en alguna intención política particular.
Sobre esa larga cordillera que demarca el municipio se destacan el Coné y el Pan de Azúcar, dos elevados cerros que caracterizan el paisaje que se ve desde el pueblo y desde los cuales se observa todo el municipio. Aunque no alcanzan el piso térmico del páramo, los cerros tienen una densa y húmeda vegetación, poco explotada y crucial para el sustento hídrico y maderero de Vianí. Cerca de ellos nacen varias quebradas y el río Contador, principal fuente de agua y destino turístico de los habitantes del municipio que suelen frecuentar en familia la cascada Calambato, su balneario favorito.
En los campos de Vianí crecen el plátano, uno de los principales productos de la cocina del municipio, lo mismo que el café, sobre el cual gira su economía. Con el café los campesinos de Vianí adquieren en los municipios vecinos los productos que les hacen falta, por lo cual su identidad se ha formado en gran medida alrededor de este cultivo.
Las ferias y fiestas de Vianí, que se celebran en junio, tienen como protagonista el café y todos los usos y costumbres que trae consigo. Los habitantes de Vianí también celebran el Festival de Bandas Folclóricas en noviembre, durante el cual la música irrumpe en los alrededores de la plaza principal.
Las "chivas" tradicionales, con sus coloridas carrocerías, recorren el municipio y sus alrededores, cumpliendo la función de buses escolares, con