Manglares y ciénagas

Ciénaga de San Jorge, Córdoba. 

Ciénaga de San Jorge, Córdoba. 

Islas del Rosario, Bolívar. 

Ciénaga de la Virgen, Cartagena, Bolívar. 

Ciénagas en el valle aluvial del río Sinú, Córdoba. 

Islas de San Bernardo, Córdoba. 

Islas de San Bernardo, Córdoba. 

Isla de Tulipán, Córdoba. 

Ciénaga Grande de Lorica, Córdoba. 

Verano en el humedal de Lorica, Córdoba. 

Ciénaga Grande de Lorica, Córdoba. 

Humedal en la Buitrera, Valle. 

Texto de: Alberto Mendoza Morales

Manglares son asociaciones de mangles. Los mangles son árboles leñosos, habitantes de los litorales tropicales y ecuatoriales del mundo. Forman ecosistemas únicos. Ciénagas son sitios de agua y cieno pantanoso. Manglares y ciénagas son además apelativos que, en Colombia, se usan en forma extensa. Dan nombre a poblaciones, playones, caños, bocas, lagunas. Dos cabos en el océano Pacífico se llaman manglares. Uno de ellos, el cabo Manglares, en el municipio de Tumaco, departamento de Nariño, constituye el territorio más occidental del país.

Los mangles son plantas halófilas, para vivir necesitan sal. Es lo que les ofrece el mar. Su madera tiene notable demanda para construcción. La tala pone en peligro su existencia. Sus raíces penetran en el mar, forman un complejo hábitat propicio para la vida de ricas y variadas especies marinas. Cuando la marea baja, las raíces descubiertas suelen verse como “patas de araña”.

Los manglares son ecosistemas únicos, ambiental, económica y socialmente valiosos. Evitan la degradación de las zonas costeras. Albergan significativas comunidades vegetales y animales, terrestres y marinas. Forman hábitat para la vida y sustentación de peces, mariscos, cangrejos, caracoles. La existencia sustentable de los manglares implica cuidado y mantenimiento que aseguren su permanencia y con ella intactas las condiciones de vida que ofrecen; desafían la adopción de una política nacional dirigida a la conservación de los manglares.

Las ciénagas se dan en zonas costeras y en sitios donde hubo desecación de lagos. Tienen vegetación palustre, es decir, de pantano o de laguna. En Colombia hay, entre muchas, dos ciénagas notables, la Ciénaga Grande de Santa Marta y la Ciénaga de Zapatosa. Y una especial, la Ciénaga de la Virgen en Cartagena.

La Ciénaga Grande de Santa Marta es un tesoro ecológico de la Llanura Caribe, un Santuario de Flora y Fauna. Ocupa la antigua bahía en la que desembocaba el río Magdalena. Es un vivero natural de peces y moluscos. El canal Clarín la une con el río Magdalena. La alimentan numerosos ríos que descienden de la Sierra Nevada. La habitan comunidades de pescadores alojados en aldeas lacustres.

La Ciénaga de la Virgen, en Cartagena, da nombre a un territorio de apreciable extensión. Lo preside el Cerro de la Popa. Lo ocupa una numerosa población desplazada del campo, alojada en una compleja y bullente zona tugurial.