Parque Biblioteca Belén

Texto de: Carolina Jaramillo Seligmann

Un vanguardista edificio empotrado en uno de los barrios más tradicionales de Medellín es la sede del Parque Biblioteca Belén. Una de las cinco bibliotecas del Sistema de Bibliotecas de Medellín —junto con La Ladera, España, San Javier y La Quintana—, pilar de la reciente transformación de la ciudad, que aspira a convertirla en la más educada del país, con una cara amable, solidaria y cultural. El sistema —cuya filosofía se enmarca en el aspecto socio-cultural y en el aprovechamiento responsable del espacio público—, lo completan la Biblioteca Pública Piloto de Medellín y sus cinco filiales, ocho bibliotecas de cultura ciudadana y cinco bibliotecas populares.

En el siglo xvii, Belén —antes corregimiento— era una de las principales entradas a la ciudad y al municipio de Heliconia. Sin embargo, fue en el siglo xx cuando sufrió su verdadera transformación que lo convirtió en uno de los sectores claves de la capital antioqueña, tras la construcción del aeropuerto Olaya Herrera en 1931, la apertura de vías de acceso importantes, y la expansión de la construcción —que se tradujo en el nacimiento de una variedad de barrios, principalmente residenciales. En la actualidad, es uno de los sectores más poblados de Medellín.

De ahí que el Parque Biblioteca Belén tenga un área de influencia muy nutrida en el suroccidente de la ciudad, que aúna los barrios Las Playas, Diego Echavarría, La Gloria, La Palma, Granada, San Bernardo, La Mota, Loma de Los Bernal, Altavista, Los Alpes, Nueva Villa de Aburrá, Miravalle, Las Violetas, El Rincón y Belén.

La elección de este espacio para la ubicación del parque biblioteca se dio por su potencial como eje de desarrollo de la ciudad, su fácil acceso para la comunidad, su cercanía a los sistemas de transporte masivo y su entorno, donde se detectó la necesidad de fortalecer el uso adecuado del espacio público.

Este escenario, en donde se funde la ciencia, la educación, la cultura y la recreación, y que busca ser un punto de encuentro ciudadano, fue donado por el gobierno japonés con el diseño conceptual de la Facultad de Paisajismo de Ingeniería Civil de la Universidad de Tokio, y bajo la dirección del prestigioso arquitecto japonés Hiroshi Naito. Precisamente en la coordinación y planeación del proyecto, Naito y su grupo de colaboradores estuvieron unos días en Medellín trabajando de la mano de la Empresa de Desarrollo Urbano, EDU. Durante esos días se aprobaron los planos finales, los diseños urbanísticos y los detalles para los acabados.

Este parque biblioteca tiene un área construida de 5 223 metros cuadrados y casi 10 000 metros cuadrados de espacio público. En su interior, además de una sala de la cultura japonesa, se encuentran la sala “Mi barrio”, espaciosas aulas de lectura y estudio, colecciones bibliográficas y documentales, colecciones infantiles y juveniles, salones para talleres, auditorios cubiertos y al aire libre, salas de exposiciones, teatro, ludotecas, salas con computadores de uso libre con servicio de Internet de banda ancha y Centros de Desarrollo Empresarial Zonal —CEDEZO. Adicionalmente, cuenta con locales comerciales, cafeterías, papelerías, estacionamiento público y amplias zonas verdes para la recreación y las actividades deportivas.

En marzo de 2008 la Biblioteca Belén fue inaugurada con una serie de actividades gratuitas, en donde la cultura japonesa fue la gran protagonista. Los asistentes pudieron acudir a la proyección de videos y multimedia sobre sus manifestaciones, al taller de origami, al taller de manga —una expresión originaria del arte japonés del siglo xi, que significa garabatos, y que goza de gran acogida en la cultura juvenil del comic y los videojuegos.