- Botero esculturas (1998)
- Salmona (1998)
- El sabor de Colombia (1994)
- Wayuú. Cultura del desierto colombiano (1998)
- Semana Santa en Popayán (1999)
- Cartagena de siempre (1992)
- Palacio de las Garzas (1999)
- Juan Montoya (1998)
- Aves de Colombia. Grabados iluminados del Siglo XVIII (1993)
- Alta Colombia. El esplendor de la montaña (1996)
- Artefactos. Objetos artesanales de Colombia (1992)
- Carros. El automovil en Colombia (1995)
- Espacios Comerciales. Colombia (1994)
- Cerros de Bogotá (2000)
- El Terremoto de San Salvador. Narración de un superviviente (2001)
- Manolo Valdés. La intemporalidad del arte (1999)
- Casa de Hacienda. Arquitectura en el campo colombiano (1997)
- Fiestas. Celebraciones y Ritos de Colombia (1995)
- Costa Rica. Pura Vida (2001)
- Luis Restrepo. Arquitectura (2001)
- Ana Mercedes Hoyos. Palenque (2001)
- La Moneda en Colombia (2001)
- Jardines de Colombia (1996)
- Una jornada en Macondo (1995)
- Retratos (1993)
- Atavíos. Raíces de la moda colombiana (1996)
- La ruta de Humboldt. Colombia - Venezuela (1994)
- Trópico. Visiones de la naturaleza colombiana (1997)
- Herederos de los Incas (1996)
- Casa Moderna. Medio siglo de arquitectura doméstica colombiana (1996)
- Bogotá desde el aire (1994)
- La vida en Colombia (1994)
- Casa Republicana. La bella época en Colombia (1995)
- Selva húmeda de Colombia (1990)
- Richter (1997)
- Por nuestros niños. Programas para su Proteccion y Desarrollo en Colombia (1990)
- Mariposas de Colombia (1991)
- Colombia tierra de flores (1990)
- Los países andinos desde el satélite (1995)
- Deliciosas frutas tropicales (1990)
- Arrecifes del Caribe (1988)
- Casa campesina. Arquitectura vernácula de Colombia (1993)
- Páramos (1988)
- Manglares (1989)
- Señor Ladrillo (1988)
- La última muerte de Wozzeck (2000)
- Historia del Café de Guatemala (2001)
- Casa Guatemalteca (1999)
- Silvia Tcherassi (2002)
- Ana Mercedes Hoyos. Retrospectiva (2002)
- Francisco Mejía Guinand (2002)
- Aves del Llano (1992)
- El año que viene vuelvo (1989)
- Museos de Bogotá (1989)
- El arte de la cocina japonesa (1996)
- Botero Dibujos (1999)
- Colombia Campesina (1989)
- Conflicto amazónico. 1932-1934 (1994)
- Débora Arango. Museo de Arte Moderno de Medellín (1986)
- La Sabana de Bogotá (1988)
- Casas de Embajada en Washington D.C. (2004)
- XVI Bienal colombiana de Arquitectura 1998 (1998)
- Visiones del Siglo XX colombiano. A través de sus protagonistas ya muertos (2003)
- Río Bogotá (1985)
- Jacanamijoy (2003)
- Álvaro Barrera. Arquitectura y Restauración (2003)
- Campos de Golf en Colombia (2003)
- Cartagena de Indias. Visión panorámica desde el aire (2003)
- Guadua. Arquitectura y Diseño (2003)
- Enrique Grau. Homenaje (2003)
- Mauricio Gómez. Con la mano izquierda (2003)
- Ignacio Gómez Jaramillo (2003)
- Tesoros del Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario. 350 años (2003)
- Manos en el arte colombiano (2003)
- Historia de la Fotografía en Colombia. Museo de Arte Moderno de Bogotá (1983)
- Arenas Betancourt. Un realista más allá del tiempo (1986)
- Los Figueroa. Aproximación a su época y a su pintura (1986)
- Andrés de Santa María (1985)
- Ricardo Gómez Campuzano (1987)
- El encanto de Bogotá (1987)
- Manizales de ayer. Album de fotografías (1987)
- Ramírez Villamizar. Museo de Arte Moderno de Bogotá (1984)
- La transformación de Bogotá (1982)
- Las fronteras azules de Colombia (1985)
- Botero en el Museo Nacional de Colombia. Nueva donación 2004 (2004)
- Gonzalo Ariza. Pinturas (1978)
- Grau. El pequeño viaje del Barón Von Humboldt (1977)
- Bogotá Viva (2004)
- Albergues del Libertador en Colombia. Banco de la República (1980)
- El Rey triste (1980)
- Gregorio Vásquez (1985)
- Ciclovías. Bogotá para el ciudadano (1983)
- Negret escultor. Homenaje (2004)
- Mefisto. Alberto Iriarte (2004)
- Suramericana. 60 Años de compromiso con la cultura (2004)
- Rostros de Colombia (1985)
- Flora de Los Andes. Cien especies del Altiplano Cundi-Boyacense (1984)
- Casa de Nariño (1985)
- Periodismo gráfico. Círculo de Periodistas de Bogotá (1984)
- Cien años de arte colombiano. 1886 - 1986 (1985)
- Pedro Nel Gómez (1981)
- Colombia amazónica (1988)
- Palacio de San Carlos (1986)
- Veinte años del Sena en Colombia. 1957-1977 (1978)
- Bogotá. Estructura y principales servicios públicos (1978)
- Colombia Parques Naturales (2006)
- Érase una vez Colombia (2005)
- Colombia 360°. Ciudades y pueblos (2006)
- Bogotá 360°. La ciudad interior (2006)
- Guatemala inédita (2006)
- Casa de Recreo en Colombia (2005)
- Manzur. Homenaje (2005)
- Gerardo Aragón (2009)
- Santiago Cárdenas (2006)
- Omar Rayo. Homenaje (2006)
- Beatriz González (2005)
- Casa de Campo en Colombia (2007)
- Luis Restrepo. construcciones (2007)
- Juan Cárdenas (2007)
- Luis Caballero. Homenaje (2007)
- Fútbol en Colombia (2007)
- Cafés de Colombia (2008)
- Colombia es Color (2008)
- Armando Villegas. Homenaje (2008)
- Manuel Hernández (2008)
- Alicia Viteri. Memoria digital (2009)
- Clemencia Echeverri. Sin respuesta (2009)
- Museo de Arte Moderno de Cartagena de Indias (2009)
- Agua. Riqueza de Colombia (2009)
- Volando Colombia. Paisajes (2009)
- Colombia en flor (2009)
- Medellín 360º. Cordial, Pujante y Bella (2009)
- Arte Internacional. Colección del Banco de la República (2009)
- Hugo Zapata (2009)
- Apalaanchi. Pescadores Wayuu (2009)
- Bogotá vuelo al pasado (2010)
- Grabados Antiguos de la Pontificia Universidad Javeriana. Colección Eduardo Ospina S. J. (2010)
- Orquídeas. Especies de Colombia (2010)
- Apartamentos. Bogotá (2010)
- Luis Caballero. Erótico (2010)
- Luis Fernando Peláez (2010)
- Aves en Colombia (2011)
- Pedro Ruiz (2011)
- El mundo del arte en San Agustín (2011)
- Cundinamarca. Corazón de Colombia (2011)
- El hundimiento de los Partidos Políticos Tradicionales venezolanos: El caso Copei (2014)
- Artistas por la paz (1986)
- Reglamento de uniformes, insignias, condecoraciones y distintivos para el personal de la Policía Nacional (2009)
- Historia de Bogotá. Tomo I - Conquista y Colonia (2007)
- Historia de Bogotá. Tomo II - Siglo XIX (2007)
- Academia Colombiana de Jurisprudencia. 125 Años (2019)
- Duque, su presidencia (2022)
Abstracción
GUILLERMO WIEDEMANN Sin título. 1963. Colloge. 86.5 x 66 cm. Colección Museo de Arte Moderno de Bogotá.
MARCO OSPINA Flor Oleo sobre lienzo. 60.b x 70.5 cm. Colección Museo de Arte Moderno de Bogotá.
MARCO OSPINA Aurora. 1950. Oleo sobre lienzo. 75.5 x 150 cm. Colección Museo de Arte Moderno de Bogotá.
GUILLERMO WIEDEMANN Mujer con Paloma. 1941. Oleo sobre lienzo. 88.1 x 68 cm. Colección Museo Nacional, Bogotá.
GUILLERMO WIEDEMANN Muralla China. 1964. Oleo sobre lienzo. 96.5 x 1.68 cm. Colección Museo de arte Moderno de Bogotá.
GUILLERMO WIEDEMANN Sin título. 1962. Acuarela sobre papel, 69.5 x 102.5 cm. Colección Museo de Arte Moderno de Bogotá.
Texto de Eduardo Serrano.
Al iniciarse el siglo XX empieza a percibirse en el arte europeo un impulso cada vez más fuerte que lo aleja de la imitación del mundo visible, surgiendo, con sus expresiones más extremas, el concepto de "abstracción" en la historia del arte moderno. Si bien algunos de los movimientos generados por dicho impulso como el Cubismo, el Suprematismo y De Stijl tomaron cuerpo y gozaron de reconocimiento antes de 1945, el arte abstracto sólo alcanza preeminencia internacional después de la Segunda Guerra Mundial, cuando Nueva York comienza a reemplazar a París como capital de la vanguardia artística.
En Colombia esa fuerza o actitud creadora alejada de la imitación de la naturaleza, se manifestó primero sutilmente en obras como la de Ignacio Gómez Jaramillo, la cual, no obstante asentarse en lo real, alcanza cierta calidad abstracta -Vía Cezanne- por su división en planos, simplificación de formas y esencialización. Pero es realmente en la segunda parte de la década de los cuarenta cuando una acttitud definitivamente abstracta comienza a perfilarse en el país; y así lo Pone de presente la obra del artista Marco Ospina (Bogotá, 1912-1983), quien partiendo de esquematizaciones de la naturaleza, como Flor (1946), llega a composiciones tan alejadas del sujeto como Aurora (1950) en las que la naturaleza ya no es reconocible aunque permanezca como inspiración, puesto que lo importante es la interacción independiente de formas y colores.
En algunas de sus primeras muestras Ospina mezclaba obras de tendencia abstraccionista con trabajos más figurativos, pero por lo general organizados simétricamente y con un claro sentido simplificador. Y aunque también habría de oscilar posteriormente entre la figuración y la abstracción, es en esta última donde alcanza sus mayores logros mediante composiciones con base en múltiples formas geométricas -triángulos, rectángulos, cuadrados y círculos de colores planos y fuertes- así como en elementos conseguidos mediante una reflexiva interrelación de dichas formas. El artista escribió varios artículos en busca de comprensión para sus inquietudes analiticas, argumentando, por ejemplo, que "el arte no sólo debe dirigirse al lado sentimental del hombre” sino en primer lugar “ a su inteligencia”, y que “cuando la sociedad salga de la barbarie y sus relaciones sean más inteligentes y armoniosas podrá gozar del arte puramente artístico”1.
Pocos años después, en 1952, el artista nortesantandereano Eduardo Ramirez Villamizar (Pamplona, 1923), presentó en Bogotá una serie de pinturas ejecutadas en París, ciudad que permanecía como centro de la abstracción geométrica, en oposición a Nueva York donde se concentraba primordialmente la abstracción expresionista2. En estas obras realizadas tambien con colores planos y con formas básicas no figurativas, Ramírez no partía de la naturaleza sino que apelaba a su agudo sentido compositivo, planteando así un concepto creativo inédito en Colombia, identificado también como "abstracto", aunque no tiene que ver con la reducción de las apariencias naturales a formas simplificadas, sino con la construcción de objetos de arte por medio de formas sin intenciones de representación.
La exposición de Ramírez -conjunta con Alberto Arboleda (Bogotá, 1925) quien presentó cerámicas de tipo utilitario- fue comentada por el crítico Walter Engel con las siguientes palabras, claramente descriptivas tanto del vanguardismo de la muestra como de la concepción creativa del artista:
“Es verdad que las superficies lisas y pulidas de las pinturas corresponden a la actual modo de París. Es verdad, igualmente, que lo no figurativo constituye la último novedad, una "novedad", desde luego, con múltiples antecedentes. ¿Pero qué nos trae, al fin, un artista de insospechable talento que ha podido absorber las enseñanzas parisienses en la fuente? Juegos de colores, con provechoso y frecuente empleo del negro, y juegos de formas, formas prestadas muchas veces a la geometría: círculos, segmentos de círculos, combinación y contraposición de curvas y líneas rectas"3.
Poco meses después de la mencionada exposición –con acasión de una muestra colectiva que incluía las obras de Ramírez y de Ospina- el mismo crítico afirmaba que desconocer la pintura abstracta "equivaldría a cerrar los ojos y a no ver los hechos", haciendo referencia al ímpetu incontrovertible que tomaba la abstracción en todo el mundo, así como a la coherencia de sus argumentos, a menudo incomprendidos por el público y rechazados por críticos y artistas de la vieja guardia, que consideraban la tendencia como vacia y superficial4.
A mediados de la década de los cincuenta, por otra parte, Guillermo Wiedemann (1905-1969, nacido en Alemania pero radicado en Colombia desde 1939), también comienza a realizar composiciones abstractas. El artista provenía de Munich, ciudad donde habían mantenido academias desde comienzos de siglo Wassily Kandinsky, (precursor del Expresionismo Abstracto) y Hans Hoffmann (cuyo trabajo maduro permitiría establecer relaciones con su obra) y donde participó en una muestra colectiva de la “Neue Sezession”5. Pero Wiedemann llegó a la abstracción por su propio camino, inspirado primero en la naturaleza del trópico, y concibiéndola más tarde en términos puramente pictóricos como color, forma, composición y textura.
Las más tempranas obras de Wiedemann en Colombia revelan su interés por la vegetación y por la población negra de la costa del Pacífico y las riberas del Magdalena, las cuales interpretó con un dibujo seguro y expresivo aunque con manchas de color cada vez más sueltas y poéticas. Posteriormente desaparecería el dibujo y con él todo vestigio de figuración, adentrándose su abstracción en un lirismo de acento cromático e intención expresionista, e introduciendo a su vez en el pais un tipo de pintura, igualmente alejado de la figuración, pero que se diferencia por completo, en su espontaneidad y transparencias, del rigor y exactitud de las obras de Ospina y de Ramírez.
A comienzos de los sesenta Wiedemann se decidió por la "abstracción pura", conformando en óleo y acuarelas la creación libre, sin alusiones a otra realidad distinta de la de sus obras. Sobre este momento de su producción escribió Marta Traba:
"La pérdida de la figura humana como tema entraña también la abolición del eje de simetría y, por consecuencia, de la estabilidad del cuadro. Pero inestabilidad no tiene por qué ser sinónimo de anarquía, de improvisación y, mucho menos cuando el pintores Wiedemann. El gran trabajo de Wiedemann fue crear un nuevo orden en cuadros emotivos y desordenados. No un orden general, sino un orden particular, de cada obra. Ese nuevo orden le libera de la vertical y la horizontal. El dinamismo tanto tiempo replegado, contenido, delatado sólo por el desbordamiento del color, se vuelve constante, torrencial. Wiedemann acepta que las formas se deshagan pero les imprime una nueva vida, que no queriendo ser ya representativa, es equivalente del movimiento”6.
Si sus acuarelas mantienen a través de sensibles transparencias el hálito poético de sus primeros cuadros, sus óleos presentan fuertes trazos y cierto asomo de geometría, no obstante su énfasis en la libertad y en el pigmento. Más adelante realizó "collages" -en los que utilizaba alambres, cuerdas, cabuya, yeso, tela y papel- cuidadosamente construidos, y que permiten comprobar gran conciencia en la composición y en la consideración de los distintos elementos. Sobre estas obras afirmó la misma autora, haciendo gala de aguda percepción, que Wiedemann logra ritmos amplios y bellos, metamorfosea los materiales "indignos" en piezas ajustadas a la unidad perseguida en cada obra, juega y discute con ellos, los subyuga o libera, sigue con una pasión dialéctica sus posibilidades de vida dentro del conjunto. Por eso cada" assemblage" es una cosa viva y armada, con una profunda novilidad interna”7. Su trabajo ha tenido una amplia repercusión en el desarrollo del arte, tanto abstracto como figurativo del país, el cual se vio afectado notoriamente con su lirismo cromático y su carácter espontáneo, experimental y expresionista.
El Expresionismo Abstracto también habría de manifestarse en los años cincuenta en algunas obras de Antonio Roda, Armando Villegas y Judith Márquez, quienes posteriormente virarían hacia otros objetivos, pero cuyos trabajos de todas maneras jugaron un papel importante en el surgimiento de esta modalidad creativa en el medio colombiano. Judith Márquez (Bogotá, 1929), por ejemplo, empezó mostrando una pintura geometrizante y de vivo colorido en la que llamó especialmente la atención su concresión sobre elementos puramente pictóricos como “sus infinitos matices, sus transparencias y transiciones, sus empastos, pigmentos y cualidades táctiles”8, pero pasaría más adelante a realizar una figuración bastante suelta que conserva su intención expresionista. La artista -quien fue también fundadora y directora de la revista Plástica, primer intento exitoso de establecer en Colombia una publicación periódica por entero dedicada a las artes visuales9- abandonó el país asi como su actividad artíca al iniciarse los años sesenta.
Notas
- Ospina, Marco. "El Arte Moderno". Revista Espiral Vol. V No. 41. Bogotá, julio de 1962, pag. 19.
- Abstracción Geométrica, término que designa aquellas obras cuyas formas son las mismas de la geometría como círculos, cuadrados, rectángulos y líneas rectas; excluyendo generalmente elementos de forma libre, áreas transparentes, brochazos enérgicos y calidades texturadas. Fueron sus pioneros y más connotados exponentes Kasimir Malevich (1878‑1935) y Piet Mondrian (1872‑1944) quienes comenzaron a realizar obras de este género durante la segunda década del presente siglo. Abstracción Expresionista, vocablo que se refiere al arte abstracto no geométrico que floreció especialmente en los Estados Unidos a partir de la Segunda Guerra Mundial, cuya esencia es la espontaneidad del artista en una expresión visual sin interés de representación. Sus más tempranos exponentes fueron Arshile Gorky (1904‑1948) y Jackson Pollock.
- Engel, Walter. "Las Artes Plásticas en 1952". El Tiempo. Bogotá, diciembre 31 de 1952.
- Engel, Walter. "Exposiciones". El Tiempo, Bogotá, junio 21 de 1953.
- Nueue Sezession, grupo formado en 1910 por jóvenes pintores alemanes en reacción a la actitud de la antigua Sezession que rechazó el trabajo de uno de ellos. Fueron sus integrantes más destacados los miembros de Die Brücke: Ernst Ludwig Kirchner (1880‑1938), Karl Schrnidt Rottluff (1884‑1976), Erick Heckel (1883‑1970) y Emil Nolde (1867‑1956), quienes se unieron con con el propósito de realizar exposiciones libres.
- Marta Traba. Bogotá, Museo de Arte Moderno de Bogotá y Editorial Planeta, 1984, pag.108.
- Ibid, pag. 109.
- Engel, Walter. “Balance. Colombia-1957”. Revista Plastica No. 10, Bogotá, 1957-58.
- La Revista Plástica, cuyo propósito era "vulgarizar nuestro arte dentro de Colombia y divulgarlo en el extranjero", contó con la colaboración permanente de los críticos Marta Traba y Walter Engel, y completó 16 números profusamente ilustrados que salieron a la luz entre 1956 y 1960. Otra revista con el mismo nombre había sido publicada por iniciativa de los alumnos de la Escuela Nacional de Bellas Artes en 1945, pero sólo circuló en un par de ocasiones.
#AmorPorColombia
Abstracción
GUILLERMO WIEDEMANN Sin título. 1963. Colloge. 86.5 x 66 cm. Colección Museo de Arte Moderno de Bogotá.
MARCO OSPINA Flor Oleo sobre lienzo. 60.b x 70.5 cm. Colección Museo de Arte Moderno de Bogotá.
MARCO OSPINA Aurora. 1950. Oleo sobre lienzo. 75.5 x 150 cm. Colección Museo de Arte Moderno de Bogotá.
GUILLERMO WIEDEMANN Mujer con Paloma. 1941. Oleo sobre lienzo. 88.1 x 68 cm. Colección Museo Nacional, Bogotá.
GUILLERMO WIEDEMANN Muralla China. 1964. Oleo sobre lienzo. 96.5 x 1.68 cm. Colección Museo de arte Moderno de Bogotá.
GUILLERMO WIEDEMANN Sin título. 1962. Acuarela sobre papel, 69.5 x 102.5 cm. Colección Museo de Arte Moderno de Bogotá.
Texto de Eduardo Serrano.
Al iniciarse el siglo XX empieza a percibirse en el arte europeo un impulso cada vez más fuerte que lo aleja de la imitación del mundo visible, surgiendo, con sus expresiones más extremas, el concepto de "abstracción" en la historia del arte moderno. Si bien algunos de los movimientos generados por dicho impulso como el Cubismo, el Suprematismo y De Stijl tomaron cuerpo y gozaron de reconocimiento antes de 1945, el arte abstracto sólo alcanza preeminencia internacional después de la Segunda Guerra Mundial, cuando Nueva York comienza a reemplazar a París como capital de la vanguardia artística.
En Colombia esa fuerza o actitud creadora alejada de la imitación de la naturaleza, se manifestó primero sutilmente en obras como la de Ignacio Gómez Jaramillo, la cual, no obstante asentarse en lo real, alcanza cierta calidad abstracta -Vía Cezanne- por su división en planos, simplificación de formas y esencialización. Pero es realmente en la segunda parte de la década de los cuarenta cuando una acttitud definitivamente abstracta comienza a perfilarse en el país; y así lo Pone de presente la obra del artista Marco Ospina (Bogotá, 1912-1983), quien partiendo de esquematizaciones de la naturaleza, como Flor (1946), llega a composiciones tan alejadas del sujeto como Aurora (1950) en las que la naturaleza ya no es reconocible aunque permanezca como inspiración, puesto que lo importante es la interacción independiente de formas y colores.
En algunas de sus primeras muestras Ospina mezclaba obras de tendencia abstraccionista con trabajos más figurativos, pero por lo general organizados simétricamente y con un claro sentido simplificador. Y aunque también habría de oscilar posteriormente entre la figuración y la abstracción, es en esta última donde alcanza sus mayores logros mediante composiciones con base en múltiples formas geométricas -triángulos, rectángulos, cuadrados y círculos de colores planos y fuertes- así como en elementos conseguidos mediante una reflexiva interrelación de dichas formas. El artista escribió varios artículos en busca de comprensión para sus inquietudes analiticas, argumentando, por ejemplo, que "el arte no sólo debe dirigirse al lado sentimental del hombre” sino en primer lugar “ a su inteligencia”, y que “cuando la sociedad salga de la barbarie y sus relaciones sean más inteligentes y armoniosas podrá gozar del arte puramente artístico”1.
Pocos años después, en 1952, el artista nortesantandereano Eduardo Ramirez Villamizar (Pamplona, 1923), presentó en Bogotá una serie de pinturas ejecutadas en París, ciudad que permanecía como centro de la abstracción geométrica, en oposición a Nueva York donde se concentraba primordialmente la abstracción expresionista2. En estas obras realizadas tambien con colores planos y con formas básicas no figurativas, Ramírez no partía de la naturaleza sino que apelaba a su agudo sentido compositivo, planteando así un concepto creativo inédito en Colombia, identificado también como "abstracto", aunque no tiene que ver con la reducción de las apariencias naturales a formas simplificadas, sino con la construcción de objetos de arte por medio de formas sin intenciones de representación.
La exposición de Ramírez -conjunta con Alberto Arboleda (Bogotá, 1925) quien presentó cerámicas de tipo utilitario- fue comentada por el crítico Walter Engel con las siguientes palabras, claramente descriptivas tanto del vanguardismo de la muestra como de la concepción creativa del artista:
“Es verdad que las superficies lisas y pulidas de las pinturas corresponden a la actual modo de París. Es verdad, igualmente, que lo no figurativo constituye la último novedad, una "novedad", desde luego, con múltiples antecedentes. ¿Pero qué nos trae, al fin, un artista de insospechable talento que ha podido absorber las enseñanzas parisienses en la fuente? Juegos de colores, con provechoso y frecuente empleo del negro, y juegos de formas, formas prestadas muchas veces a la geometría: círculos, segmentos de círculos, combinación y contraposición de curvas y líneas rectas"3.
Poco meses después de la mencionada exposición –con acasión de una muestra colectiva que incluía las obras de Ramírez y de Ospina- el mismo crítico afirmaba que desconocer la pintura abstracta "equivaldría a cerrar los ojos y a no ver los hechos", haciendo referencia al ímpetu incontrovertible que tomaba la abstracción en todo el mundo, así como a la coherencia de sus argumentos, a menudo incomprendidos por el público y rechazados por críticos y artistas de la vieja guardia, que consideraban la tendencia como vacia y superficial4.
A mediados de la década de los cincuenta, por otra parte, Guillermo Wiedemann (1905-1969, nacido en Alemania pero radicado en Colombia desde 1939), también comienza a realizar composiciones abstractas. El artista provenía de Munich, ciudad donde habían mantenido academias desde comienzos de siglo Wassily Kandinsky, (precursor del Expresionismo Abstracto) y Hans Hoffmann (cuyo trabajo maduro permitiría establecer relaciones con su obra) y donde participó en una muestra colectiva de la “Neue Sezession”5. Pero Wiedemann llegó a la abstracción por su propio camino, inspirado primero en la naturaleza del trópico, y concibiéndola más tarde en términos puramente pictóricos como color, forma, composición y textura.
Las más tempranas obras de Wiedemann en Colombia revelan su interés por la vegetación y por la población negra de la costa del Pacífico y las riberas del Magdalena, las cuales interpretó con un dibujo seguro y expresivo aunque con manchas de color cada vez más sueltas y poéticas. Posteriormente desaparecería el dibujo y con él todo vestigio de figuración, adentrándose su abstracción en un lirismo de acento cromático e intención expresionista, e introduciendo a su vez en el pais un tipo de pintura, igualmente alejado de la figuración, pero que se diferencia por completo, en su espontaneidad y transparencias, del rigor y exactitud de las obras de Ospina y de Ramírez.
A comienzos de los sesenta Wiedemann se decidió por la "abstracción pura", conformando en óleo y acuarelas la creación libre, sin alusiones a otra realidad distinta de la de sus obras. Sobre este momento de su producción escribió Marta Traba:
"La pérdida de la figura humana como tema entraña también la abolición del eje de simetría y, por consecuencia, de la estabilidad del cuadro. Pero inestabilidad no tiene por qué ser sinónimo de anarquía, de improvisación y, mucho menos cuando el pintores Wiedemann. El gran trabajo de Wiedemann fue crear un nuevo orden en cuadros emotivos y desordenados. No un orden general, sino un orden particular, de cada obra. Ese nuevo orden le libera de la vertical y la horizontal. El dinamismo tanto tiempo replegado, contenido, delatado sólo por el desbordamiento del color, se vuelve constante, torrencial. Wiedemann acepta que las formas se deshagan pero les imprime una nueva vida, que no queriendo ser ya representativa, es equivalente del movimiento”6.
Si sus acuarelas mantienen a través de sensibles transparencias el hálito poético de sus primeros cuadros, sus óleos presentan fuertes trazos y cierto asomo de geometría, no obstante su énfasis en la libertad y en el pigmento. Más adelante realizó "collages" -en los que utilizaba alambres, cuerdas, cabuya, yeso, tela y papel- cuidadosamente construidos, y que permiten comprobar gran conciencia en la composición y en la consideración de los distintos elementos. Sobre estas obras afirmó la misma autora, haciendo gala de aguda percepción, que Wiedemann logra ritmos amplios y bellos, metamorfosea los materiales "indignos" en piezas ajustadas a la unidad perseguida en cada obra, juega y discute con ellos, los subyuga o libera, sigue con una pasión dialéctica sus posibilidades de vida dentro del conjunto. Por eso cada" assemblage" es una cosa viva y armada, con una profunda novilidad interna”7. Su trabajo ha tenido una amplia repercusión en el desarrollo del arte, tanto abstracto como figurativo del país, el cual se vio afectado notoriamente con su lirismo cromático y su carácter espontáneo, experimental y expresionista.
El Expresionismo Abstracto también habría de manifestarse en los años cincuenta en algunas obras de Antonio Roda, Armando Villegas y Judith Márquez, quienes posteriormente virarían hacia otros objetivos, pero cuyos trabajos de todas maneras jugaron un papel importante en el surgimiento de esta modalidad creativa en el medio colombiano. Judith Márquez (Bogotá, 1929), por ejemplo, empezó mostrando una pintura geometrizante y de vivo colorido en la que llamó especialmente la atención su concresión sobre elementos puramente pictóricos como “sus infinitos matices, sus transparencias y transiciones, sus empastos, pigmentos y cualidades táctiles”8, pero pasaría más adelante a realizar una figuración bastante suelta que conserva su intención expresionista. La artista -quien fue también fundadora y directora de la revista Plástica, primer intento exitoso de establecer en Colombia una publicación periódica por entero dedicada a las artes visuales9- abandonó el país asi como su actividad artíca al iniciarse los años sesenta.
Notas
- Ospina, Marco. "El Arte Moderno". Revista Espiral Vol. V No. 41. Bogotá, julio de 1962, pag. 19.
- Abstracción Geométrica, término que designa aquellas obras cuyas formas son las mismas de la geometría como círculos, cuadrados, rectángulos y líneas rectas; excluyendo generalmente elementos de forma libre, áreas transparentes, brochazos enérgicos y calidades texturadas. Fueron sus pioneros y más connotados exponentes Kasimir Malevich (1878‑1935) y Piet Mondrian (1872‑1944) quienes comenzaron a realizar obras de este género durante la segunda década del presente siglo. Abstracción Expresionista, vocablo que se refiere al arte abstracto no geométrico que floreció especialmente en los Estados Unidos a partir de la Segunda Guerra Mundial, cuya esencia es la espontaneidad del artista en una expresión visual sin interés de representación. Sus más tempranos exponentes fueron Arshile Gorky (1904‑1948) y Jackson Pollock.
- Engel, Walter. "Las Artes Plásticas en 1952". El Tiempo. Bogotá, diciembre 31 de 1952.
- Engel, Walter. "Exposiciones". El Tiempo, Bogotá, junio 21 de 1953.
- Nueue Sezession, grupo formado en 1910 por jóvenes pintores alemanes en reacción a la actitud de la antigua Sezession que rechazó el trabajo de uno de ellos. Fueron sus integrantes más destacados los miembros de Die Brücke: Ernst Ludwig Kirchner (1880‑1938), Karl Schrnidt Rottluff (1884‑1976), Erick Heckel (1883‑1970) y Emil Nolde (1867‑1956), quienes se unieron con con el propósito de realizar exposiciones libres.
- Marta Traba. Bogotá, Museo de Arte Moderno de Bogotá y Editorial Planeta, 1984, pag.108.
- Ibid, pag. 109.
- Engel, Walter. “Balance. Colombia-1957”. Revista Plastica No. 10, Bogotá, 1957-58.
- La Revista Plástica, cuyo propósito era "vulgarizar nuestro arte dentro de Colombia y divulgarlo en el extranjero", contó con la colaboración permanente de los críticos Marta Traba y Walter Engel, y completó 16 números profusamente ilustrados que salieron a la luz entre 1956 y 1960. Otra revista con el mismo nombre había sido publicada por iniciativa de los alumnos de la Escuela Nacional de Bellas Artes en 1945, pero sólo circuló en un par de ocasiones.