Sake

Juegos de porcelana para tomar Sake.   Matthew Leighton.

Texto de: Tamiko Nakasu Alicia A. Komiya

Durante las comidas se acostumbra a tomar en Japón el vino llamado sake, y para terminar, el té verde del país.

El sake se obtiene a partir de la fermentación del arroz. Tanto el grano como el agua que se emplean en su elaboración, deben ser de alta calidad.

Hay dos tipos de sake, uno de gusto más dulce, que se emplea generalmente en culinaria para la preparación de platos, y el que se acostumbra a tomar como bebida. Este último puede servirse caliente, a la temperatura ambiente, o frío. Su contenido alcohólico oscila entre el 15 y el 16 por ciento.

El recipiente en que se sirve el sake, por lo general de porcelana, se denomina tokkuri y su capacidad aproximada promedio es de 200 ml. Las tazas en que se bebe, también de porcelana, reciben el nombre de sakazuki y su capacidad es moderada.

Este recipiente se llena hasta la línea del cuello y se pone, a fuego bajo, en una olla con agua hirviendo. Para servirlo a una temperatura media (43O C.), hay que sumergirlo entre 2 y 3 minutos; si se desea más caliente (50O C.), entre 3 y 4 minutos, y si se prefiere todavía más caliente (55O C.), entre 4 y 5 minutos. En los días cálidos se prefiere apenas tibio y en los dias fríos, más caliente.

Comúnmente, el sake caliente recibe el nombre de atsukan, aunque, en realidad, nunca debe estar demasiado caliente. Cuando los labios tocan la taza, la temperatura debe ser agradable. El sake que se calienta y no se consume puede ser utilizado en la preparación de alguna receta, pero nunca debe recalentarse para servir como bebida.